Con cierta nostalgia, Juan Domingo Martillo Roldán cuenta que desde que nació tiene sangre de campo. El boxeo simplemente fue un amor fugaz que lo ayudó a conocer el estrellato, pero sus raíces siempre estuvieron afincadas a la vida agraria.
Hoy es la cara visible del este de Córdoba que pelea contra las inundaciones y la suba de las napas, que tienen en jaque a la región. "Esto empezó hace dos años. Teníamos el agua de las napa a 14 metros y ahora está a 20 centímetros. Cada vez que cae una llovizna, se inunda todo. Están desapareciendo pueblos", le dijo el histórico boxeador Martillo Roldán a Infobae.
Oriundo en Freyre, un pueblo cordobés ubicado en el límite con Santa Fe a 30 kilómetros de San Francisco y a 60 de Rafaela, contó la extrema realidad de la zona. "Es la primera vez que hay una situación tan grave. Esto puede generar que desaparezcan pueblos. Bauer y Siguel (pueblo a 20 minutos de Freyre) va a desaparecer. Y cada vez se va más el agua para Coronel Fraga", sentenció con amplio conocimiento del este cordobés que convive con este penoso presente.
Si bien su campo de 80 hectáreas cercano al cementerio por ahora no sufre las peores consecuencias por encontrarse en la zona "alta", Roldán aseguró: "En el corto plazo se va a agravar la situación. Viene un diluvio y el campo que vale una fortuna pasa a valer nada. Se convierte en una laguna. Se desalquilaron muchos campos porque de un momento a otro son lagunas".
Con la parsimonia de un hombre campo, pero con el dolor a cuestas del tenso momento señaló sobre los contratiempos que deben afrontar: "No puedo ni llegar a veces a mi campo porque los caminos están llenos de agua. Yo me pongo las botas y camino por el barro".
"No esperaba vivir algo así", comentó el chacarero que desde hace 59 años está asentado en Freyre y se alejó del boxeo porque "no quieren trabajar" los pupilos que podría tener. "El campo es mi vida", reconoce, tras explicar que "no sabemos de donde viene el agua" y que se perdieron miles kilos de cosecha de trigo y soja.
Martillo Roldán fue icono del boxeo argentino en los 80′. Reconocido como un increíble pegador, protagonizó peleas de importancia del peso mediano en Las Vegas. Estuvo cara a cara en el ring con pugilistas de la talla de Marvin Maravilla Hagler, Thomas Hearns y Ray Phillips. Su último combate se dio con derrota contra Michael Nunn, a fines de 1988.