Desmantelan un ‘call center de extorsiones’ en la cárcel de Sincelejo (Sucre)

En un trabajo conjunto entre los Gaula (Grupos de Acción Unificada por la Libertad Personal) de la Policía y del Ejército, así como de la Fiscalía General de la Nación, se logró desmantelar lo que era prácticamente un ‘call center’ para pepetrar extorsiones en la cárcel La Vega, en Sincelejo (Sucre).

Durante un allanamiento que llevaron a cabo los integrantes de la Fuerza Pública, fueron hallados celulares y sim card con las que, presuntamente, privados de la libertad hacían llamadas extorsivas desde el penal.

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“Con esta intervención se pretende contrarrestar la realización de llamadas extorsivas y la incautación de elementos materiales probatorios que infieran sobre la posible comisión del delito de la extorsión desde este centro carcelario”, citaron de la información que entregó la Policía en el periódico regional El Heraldo.

En total encontraron 11 teléfonos celulares, así como 360 gramos de estupefacientes, 205 de marihuana y 160 de base de coca, en el pabellón donde realizaron los allanamientos los uniformados, destacaron en la Emisora Atlántico.

El operativo se realizó en un pabellón del establecimiento carcelario en el que permanecen 68 personas entre sindicados y condenados, destacaron en el diario caribeño.

Agregaron que tanto los dispositivos de comunicación, como las sustancias psicoactivas se entregaron a la Fiscalía en la recopilación del material probatorio por estos hechos.

A inicios de marzo se realizó un operativo similar en el mismo establecimiento carcelario donde incautaron 23 celulares y 53 sim cards, más estupefacientes y armas cortopunzantes, donde las autoridades señalaron que esos elementos serían propiedad de señalados integrantes del Clan del Golfo.

Luego de que se conociera de la masacre de tres carabineros en el país suramericano, acribillados y luego incinerados en una patrulla de la institución, el general William René Salamanca, director de la Policía en Colombia, envió un mensaje de pésame a sus homólogos chilenos y anunció que dejaba a su disposición investigadores para esclarecer ese crimen.

“Le expresa al general Ricardo Yañez, director de Carabineros de Chile, la solidaridad en estos momentos de inmenso dolor. Han sido asesinados cobardemente (...) 171.000 policías de Colombia a su lado y ofrecemos todas las capacidades de nuestra institución para dar con los responsables”, dijo el alto mando.

Debido a ese casi inesperado atentado, ocurrido justo cuando los Carabineros celebraban su 97 aniversario, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia también envió un mensaje de condolencia al Estado chileno.

“El Gobierno de la República de Colombia se solidariza con el pueblo de Chile y con los familiares de los carabineros emboscados esta madrugada. Nuestro país hace un llamado para que hechos dolorosos como estos no se repitan nunca más (sic)”, trinaron en su cuenta oficial de la red social X.

La masacre tuvo lugar en la provincia de Arauco, al oeste de Chile, donde tres miembros de la policía militarizada de Carabineros fueron asesinados y sus cuerpos incinerados dentro de un vehículo de la institución, un acto que ha conmocionado a la sociedad chilena.

“Es atacar a toda la nación”, expresó el presidente Gabriel Boric al conocer el grave suceso.

Los cuerpos calcinados de los uniformados fueron encontrados en una patrulla en una carretera cerca de Cañete, en los límites con Concepción. Como respuesta, se desplegó un resguardo militar en la zona, debido a los constantes ataques incendiarios atribuidos a grupos radicales de indígenas mapuches, quienes reclaman territorios que consideran ancestrales.

Las víctimas fueron identificadas como el sargento primero Carlos José Cisterna Navarro, los cabos primero Misael Magdiel Vidal Cid y Sergio Antonio Arévalo Lobo, cuyos restos fueron descubiertos por voluntarios de Bomberos.