La coyuntura opera. La edición 2017 del Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires promete ser la mejor. En 19 años de historia y siete versiones previas, nunca antes el contexto había sido tan auspicioso. La confianza y el optimismo brota de cada stand y gobierna la atmósfera de la muestra. Hay expectativas de récord de público, más de 60 novedades en términos de lanzamientos y rejuvenecimientos de line-ups, presentaciones mundiales y latinoamericanas, 35 mil metros cuadrados de puro entusiasmo automotriz.
En números: 115 stands con más de 30 marcas de autos, más de dos mil periodistas acreditados de todos los países sudamericanos y de naciones como Estados Unidos, España, Italia y Francia, más de 300 autos en escena y el pronóstico de alcanzar los 500 mil visitantes, una histórica frontera del sector. La ilusión está renovada. La edición anterior estuvo atravesada por la situación coyuntural de país: modestas presentaciones, ausencias destacadas, importaciones restringidas y un velo de austeridad nubló la feria automotriz argentina de 2015, denominada por entonces el "Salón de la Crisis".
El Salón de Buenos Aires 2017 se presenta recuperado: asume uno de los despliegues más fastuosos de toda su trayectoria. Es el "Salón de la Oportunidad". Hay un sinfín de atracciones. Hay autos nuevos, de lujo y económicos, hay deportivos que se ven poco y los entrada de gama que se ven mucho, hay modelos para pensar en comprar y hay modelos aspiracionales, hay pick-ups y sedanes urbanos, hay concepts cars inverosímiles, hay prototipos futuristas, hay autos ecológicos y una bajada de línea para educar al consumidor argentino: hay potencia, motor, conciencia y show.
Está el Toyota Prius de motorización híbrida que redujo su precio un 37% a 38.900 dólares alentado por la decisión del gobierno nacional de reducir impuestos a los vehículos ecológicos. Junto a él el SUV chico híbrido C-HR y el Mirai propulsado por un motor eléctrico alimentado por una pila de combustible suministrada por hidrógeno, en vías de ser lanzado en el país. El Mondeo híbrido que Ford lanzará en 2018, las versiones eléctrica e híbrida del Golf que Volkswagen pretende importar, y a espera de novedades en relación a la Renault Kangoo Z.E. y el Chevrolet Bolt.
La gama de vehículos sustentables comparten escena con tres hipnóticas Ferraris para hacer del Salón un variopinto abanico de la vasta industria. California T, 488 GTB y F12berlinetta serán, probablemente, los modelos más instagrameados de la muestra emplazada en el predio de La Rural. Y en términos de novedades para el mercado argentino, una amplia gama de opciones: el Kwid, reemplazo del Clio, de Renault, el restyling del UP! y la nueva Amarok con motor V6 de VW, la Innova de tres filas de asientos de Toyota, la nueva EcoSport de Ford, el lanzamiento del Camaro SS y la Equinox de Chevrolet, el SUV chico Kicks y la Frontier Attack de Nissan, el Argo de Fiat, su nuevo hatchback chico.
De los dos deportivos de la firma Pagani Automobili hay uno solo. El Pagani Zonda Revolution del homenaje al constructor y fabricante argentino Horacio Pagani está demorado por razones ajenas al dueño y a la organización, que en un mensaje dirigido a los fanáticos que habían programado la visita para ver este exclusivo deportivo lamenta el inconveniente. Pero avisa que el otro Pagani Zonda F sí participa de la muestra. Tampoco estarán varias marcas importadas que eligieron no montar un stand en la feria: los visitantes no verán ningún Alfa Romeo, BMW, Hyundai o, Kia, entre otros.
Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires: del 10 al 20 de Junio de 2017, de 12 a 22hs en el Predio La Rural, $200 el valor de la entrada (gratuito para menores de 7 años y personas con discapacidad)
Pero no solo de autos se vale el Salón. También hay pista off-road con modelos de ocho compañías en circulación, exhibición de autos clásicos y militares -originales y réplicas-, exposición de bólidos de competición, pista de educación vial y venta de automóviles a escala, plataformas interactivas y simuladores de manejo, guarderías, estacionamiento cubierto para 1.500 unidades, patio de comidas, guardarropas. Lo necesario para hacer del Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires una revancha.
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