La velocidad sobre dos ruedas alcanzó un nuevo récord. El viejo sueño de llevar una moto a 400 kilómetros por hora ya es una realidad. El registro lo consiguió el piloto Kenan Sofuoglu a bordo de la Kawasaki Ninja H2R, coronada ahora como la motocicleta de producción en serie más veloz jamás creada. El matrimonio entre un piloto experto y una majestuosa obra de la ingeniería deportiva quedará en los anales de las mejores marcas de velocidad de la historia.
Los 400 km/h son de por sí un registro impresionante, aunque su valor sea multiplicado por el tiempo en el que ha alcanzado tamaña aceleración: 26 segundos. Una cifra sólo relativa a las prestaciones desarrolladas por compañías apasionadas y obnubiladas por la adrenalina del tamaño de Koenigsegg, Bugatti o Hennessey. El ingreso de una moto a este selecto, competitivo y dinámico grupo atestigua el rendimiento de la aerodinámica y la potencia sobre dos ruedas.
La Kawasaki Ninja H2R presume de un motor de cuatro cilindros y un litro de cilindrada, sobrealimentado por compresor, capaz de erogar descabellados 326 CV. Su silueta, agresiva y radical del potencial aerodinámico del modelo, se asemeja a un avión caza de combate.
El piloto turco Sofuoglu era el indicado para asumir este desafío. Cuatro veces campeón del mundo de World Supersport, actual puntero en la clasificación y aspirante al pentacampeonato, lo colocan como la máxima figura del escenario actual de superbikes. El patrocinio personal de la marca japonesa le añade anuencia oficial al nuevo récord.
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"No recuerdo de dónde saqué la idea de la plusmarca, pero cuando firmé el acuerdo con Kawasaki para 2016 me gustó y quería tener esta moto de edición especial. Cuando la pedí, me dijeron que su velocidad máxima era de 380 km/h y que su sueño era llegar a los 400 km/h. La primera vez que rodé con ella sentí su enorme potencia y velocidad", anunció el deportista, luego de aclarar también que debió prepararse cuatro meses para esta aventura, asumiendo pequeños cambios en la moto sin alterar su configuración original.
En procura de conseguir el éxito, la compañía Pirelli desarrolló un compuesto personalizado para la ocasión, con llantas de un agarre superior pero de baja durabilidad. Sofuoglu precisaba alcanzar las cuatro centenas de velocidad en un espacio temporal inferior a los 30 segundos. Para remontar esta aceleración, los neumáticos deben ofrecer una utilidad especial, de un rendimiento corto pero eficiente.
El escenario elegido fue materializar esta proeza fue el puente Osmaz Gazi, que une Estambul con Izmirla, cruza el Golfo de Iznit, y tiene una longitud de tres kilómetros y es el cuarto de versión colgante más largo del mundo. Para la prueba, que se realizó a las cinco de la mañana, el tránsito fue interrumpido y el piloto usó un traje mono diseñado especialmente por Rev'It para la aventura.
Un Corvette modificado rompe el récord al auto eléctrico más rápido del mundo https://t.co/dU2j6TRduv pic.twitter.com/8DPlRncyha
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Si bien el modelo ganador es de fabricación en serie, es una moto exclusiva para conducir en circuitos cerrados y no está homologada para su circulación en calle, vía pública o autopista. El potencial de la Kawasaki Ninja H2R es evolutivo: Kenan Sofuoglu había declarado 391 kilómetros por hora hace menos de un mes, en los ensayos previos rubricó 396 kilómetros por hora, en la marca registró 400 kilómetros por hora. Su capacidad no se termina.