La obispo pronunció las palabras habituales mientras colocaba sus manos sobre el nuevo diácono de nombre M, pero lo hizo de una forma diferente a la habitual.
"Derrama tu Espíritu Santo sobre M", dijo la obispo. "Envíalos ahora para anunciar las buenas nuevas de Jesucristo, para anunciar el reino de Dios y para preparar a la iglesia para el ministerio".
No "lo envíes ahora" o "la envíes ahora". "Envíalos ahora".
M Barclay luchó 12 años para finalmente poder escuchar estas palabras.
Barclay, una persona transgénero que no se identifica ni como hombre ni como mujer, fue ordenado como el primer clérigo de identidad neutral de la Iglesia Metodista Unida.
Esta iglesia es una de las denominaciones más grandes de Estados Unidos, tercera solo después de la Iglesia Católica y la Convención Bautista del Sur. La vertiente Protestante se dividió debido a la identidad de género y la sexualidad: sus reglas oficiales dicen que el clero debe ser célibe o estar dentro de un matrimonio heterosexual y que solo pueden llevar a cabo este tipo de unión. Pero obispos estadounidenses han ordenado clérigos homosexuales y transexuales, y estos han casado a personas del mismo sexo.
En la Conferencia del norte de Illinois, donde Barclay fue ordenado, la obispo Sally Dyck le dijo al servicio de noticias de la Iglesia Metodista Unida: "Yo espero que la iglesia esté, en un futuro cercano, en una nueva posición cuando hablemos de inclusión. Dicho eso, M y los otros candidatos son parte del testimonio de la iglesia y de llegar a otras personas que necesitan las buenas nuevas de Jesucristo".
El personal de la Conferencia del norte de Illinois no respondió a las preguntas de The Washington Post.
Fue un largo camino antes de que Barclay tuviera la oportunidad de ser ordenado. El ahora clérigo metodista, quien fue criado en una comunidad conservadora de Pensacola, Florida, dijo que cuando decidió entrar al ministerio se identificó como una mujer heterosexual. En el 2005, cuando aún era una jovencita, Barclay se matriculó en el Austin Presbyterial Theological Seminary, en Texas.
Leer sobre teología por aproximadamente un año – incluida la teología feminista y gay – ayudó a Barclay a darse cuenta de que no era heterosexual después de todo. Así que inicialmente se declaró como una mujer lesbiana.
"Durante el próximo año debatí sobre si mantenerme en contacto con la Iglesia. Luché con todo el daño que la Iglesia ha hecho, no solo a las personas LGBT, pero a las otras personas también marginadas. No estaba seguro si quería ser parte de eso", dijo Barclay.
Barclay llegó a terminar el seminario y se fue a trabajar como director juvenil en la Iglesia Metodista Unida de Austin.
En el 2012, Barclay intentó ordenarse en Texas. En ese momento, estaba identificado como una mujer que tenía una relación con otra mujer. Barclay pensó que esto la llevaría a una descalificación inmediata por lo que se sorprendió cuando pasó a la siguiente ronda de entrevistas. Pero la próxima junta rehusó incluso reunirse con Barclay, lo que provocó un debate público candente.
Luego de una larga pelea, Barclay logró obtener la entrevista pero no la aprobó. Entonces decidió mudarse de Austin a Chicago y comenzó a trabajar en la Reconciling Ministries Network, una organización dentro de la Iglesia Metodista Unida que promueve la inclusión de transgénero y de personas que no están conformes con su género.
Estando allí, Barclay se sintió seguro para decir que era no solo homosexual, sino transgénero. Entonces, luego de otro retraso procesal, este se reunió con la junta local donde aprobaron su candidatura al clero con gran entusiasmo. Barclay fue nombrado diácono, pero tendrá que esperar un período de dos años, por el que todos pasan, antes de ser ordenado oficialmente en el 2019.
En este momento, Barclay no se encuentra en ninguna relación sentimental, por lo que no está violentando la regla de la Iglesia que dice que un clérigo solo puede tener relaciones sexuales dentro de un matrimonio heterosexual y esta no prohíbe el clero transgénero.
Sin embargo, el asunto de la identidad de género de Barclay preocupa a varios miembros de la Iglesia. El reverendo Thomas Lambrecht, director general del grupo Good News de la Iglesia Metodista Unida y quien está en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo o clérigos gay, dijo que la mayoría en Good News creen que las personas deberían vivir con el género de nacimiento, aunque los trangénero deberían ser bienvenidos en las iglesias.
Barclay dijo que ha recibido muchos mensajes de personas que se oponen a su liderazgo dentro de la iglesia debido a su identidad de género. Pero este también ha escuchado del apoyo de cristianos LGBT, de padres de jóvenes gay y de otras iglesias que buscan la opinión de Barclay sobre una teología que abarque la enseñanza cristiana y la inclusión homosexual.