Aquí te decimos por qué lo hacen.
En When Harry Met Sally, Meg Ryan hace una broma acerca de que "la mayoría de las mujeres en algún momento de su vida lo fingen". Con "lo" se refería, por supuesto, al orgasmo femenino.
Y tenía razón. Muchos estudios han demostrado que la mayoría de las mujeres dicen que lo han hecho –pero no son sólo las mujeres las que fingen orgasmos. Una investigación reciente encontró que, al menos entre los universitarios, aproximadamente uno de cada cuatro hombres dice que también lo ha hecho.
En el primer estudio, los investigadores encuestaron a 50 universitarios que ya habían fingido un orgasmo, lo que significa que o no habían tenido un orgasmo real o que lo habían fingido o le habían dicho a su pareja que si lo habían tenido. Se les preguntó para que se reflejaran en sus propias experiencias y hacer una lista de las posibles razones por las que alguien fingiría un orgasmo durante el sexo. Los investigadores tomaron la lista de resultados y añadieron una docena de otras posibles razones extraídas de otras investigaciones enfocadas en la motivación de los comportamientos sexuales de manera más amplia, para respaldar la aportación de los estudiantes.
Después continuaron con otros dos estudios que, al combinarlos, involucraban a más de 1,400 adultos que también tenían experiencia previa en fingir orgasmos. La gente calificó si estaba de acuerdo o no con cada razón de la lista, y después los investigadores buscaron los patrones de las respuestas.
Sus análisis revelaron que las razones por las que las personas fingen orgasmos se dividen en seis grupos diferentes:
- Se siente bien (“Es emocionante y satisfactorio”, “me hace sentir amado”).
- Es algo que hago por mi pareja (“No quiero herir los sentimientos de mi pareja”, “Hace feliz a mi pareja”, “Aumenta la excitación de mi pareja”).
- No tengo ganas de tener sexo ( “El sexo está tardando demasiado y quiero que se acabe”, “No estoy disfrutando del sexo”).
- Quiero manipular a mi pareja o sentirme poderoso (“Me gusta dominar y controlar a mi pareja”, “Es una herramienta poderosa y puedo usarla para obtener otras cosas de mi pareja”).
- Soy inseguro (“No quiero que mi pareja piense que soy malo en el sexo”, “Me da miedo que mi pareja se enoje conmigo si no lo hago”).
- Quiero conectarme emocionalmente con mi pareja (“Es una forma de expresar el amor”, “Me hace sentir cerca de mi pareja a nivel emocional”).
Como lo podemos ver, la gente a veces finge orgasmos para obtener algo de eso. Sin embargo, otras veces, la gente los finge por el bien de la relación porque sus parejas obtienen algo de eso. Y otras veces, porque las circunstancias sexuales simplemente no van a lograr que alcance un orgasmo.
Este estudio nuevo encontró que son más las mujeres que los hombres las que dijeron que habían fingido orgasmos. Pero las mujeres no solo los fingen con más frecuencia sino que sino que hay diferencias de género en las razones para fingirlos. Sobre todo, las mujeres son más propensas a pretender el orgasmo para beneficiar a sus parejas, mientras que los hombres tienden más a fingirlos por sus inseguridades, un deseo de conectar emocionalmente, y porque se quieren sentir poderosos.
Nuestras razones para fingirlos también varían con la edad: los adultos mayores son más propensos a pretender un orgasmo porque quiere complacer a sus parejas y conectar emocionalmente con ellas.
Entonces, ¿está bien fingir orgasmos? Para esta pregunta no existe una respuesta fácil. Pretender tener un orgasmo no es intrínsecamente bueno o malo –en realidad depende de la razón por la que lo hagas. Esto significa que no deberías asumir necesariamente que un orgasmo falso de vez en cuando es una señal de alarma. De hecho, como los autores de esta investigación escribieron en el documento: "pretender tener un orgasmo no es un indicio de que la pareja tiene problemas que resolver".
Dicho esto, si lo haces porque el sexo es malo y vas a tener que seguir teniendo sexo con esta persona, fingir tal vez no sea la mejor idea. Todos tus gemidos y gritos le están dando una mala impresión de lo que hace que te vengas, y por ende te vas a encontrar con encuentros futuros más decepcionantes. Mejor ten una buena comunicación con tu pareja para que sepa lo que te gusta y lo que no.
De la misma forma, si lo haces porque crees que el otro espera un orgasmo, sólo estás alimentando la idea de que el sexo sin orgasmo no es sexo –y eso solo reforzara la presión que hay en el desempeño que tienes que dar, por ende vas a reducir tus probabilidades de tener un verdadero orgasmo.
Por el contrario, si lo finges porque es algo que realmente disfrutas o porque de verdad quieres hacer feliz a tu pareja, esa es otra historia. En este caso, todos aquellos que fingen gemidos y gritos tienen una gran posibilidad de mejorar el sexo, y tal vez también hasta la relación.
Publicado originalmente en VICE.com