A pesar del hallazgo, el presidente Michel Temer busca concesionar una enorme porción de la selva a un grupo de empresas mineras.
Los secretos que guarda la selva del Amazonas, en Brasil, siguen fascinando a los científicos: esta semana, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés) informó que recientemente se han hallado 381 nuevas especies de plantas y animales, todas ellas ubicadas en ecosistemas que están amenazados por los seres humanos.
Encontrar nuevas especies es algo que sucede con relativa frecuencia en la selva más grande del mundo. Los exploradores descubren un nuevo arbusto o una criatura literalmente cada día con sólo explorar zonas que están en riesgo por el cultivo, la tala u otro tipo de actividades destructivas por parte de los humanos. Sin embargo, estos 381 hallazgos se encuentran en especial riesgo de desaparecer.
De acuerdo con el informe de la WWF en Brasil, los hallazgos ocurrieron entre 2014 y 2015, cuando los exploradores conocieron a un delfín rosado que nada en ríos, una rara ave de plumaje esponjoso, así como 93 tipos de peces y 216 plantas, entre otros.
"Nuestras actividades económicas, como seres humanos, están causando la extinción de cientos de especies antes de que podamos conocerlas y estudiarlas", lamentó Ricardo Mello, coordinador del programa en la selva del Amazonas de la WWF Brasil.
Recientemente, un juez federal bloqueó temporalmente una iniciativa del presidente brasileño Michel Temer, quien pretendía concesionar una zona natural del Amazonas tan grande como Dinamarca a varias empresas mineras.
La medida judicial exhibe la tirante relación que tiene Brasil con sus zonas naturales: de nuevo, un presidente impopular busca crecimiento económico a costa de los recursos naturales del país y se enfrenta a activistas y científicos que defienden la selva. En este caso, la oposición ha calificado el intento del presidente Michel Temer como "el más grande ataque contra la Amazonía en los últimos 50 años".
La decisión del juez federal ya fue apelada por el fiscal general de Brasil, mientras los ambientalistas preparan la defensa del hábitat de probablemente cientos de especies que el ser humano aún no conoce.
Publicado originalmente en VICE.com