Más allá de los embates que ha sufrido el Grupo Volkswagen en los últimos meses por el escándalo de emisiones que se estima le costará más de $15.000 mil millones de dólares sólo en los EEUU, el gigante alemán que controla entre otras marcas a Porsche, Bentley, Audi y Skoda tuvo un papel protagónico en la feria tecnológica que se está llevando a cabo en Las Vegas demostrando que continúa como referente mundial en investigación y desarrollo.
Sin lugar a dudas el CES se convirtió de manera extraoficial en un salón del automóvil más en el calendario mundial, disputándole protagonismo a Auto Show de Detroit que abrirá sus puertas el próximo 8 de enero. Es que la influencia de los avances tecnológicos sobre la industria del automóvil es tal que se espera que en el futuro cercano los vehículos operen más como una extensión de nuestros smartphones que como un simple medio de locomoción.
Otro de los fabricantes germanos que acaparó todas las miradas fue BMW con su concept-car i Inside Future Sculpture que responde a la pregunta sobre el futuro del automóvil según el fabricante bávaro, con un enfoque revolucionario en lo que hace al diseño del habitáculo de pasajeros.
Con una estética que recuerda más a un living de inspiración minimalista, el interior del BMW fue creado como un espacio para vivir con distintos ambientes, en una cabina de clara inspiración futurista pero a la vez completamente realista.
Con el foco puesto más en el confort que en el placer de conducir típico de la marca, el tablero evita la clásica orientación del cockpit hacia el conductor prefiriendo un despliegue donde se invita a los pasajeros a interactuar, incluso a su conductor dadas las capacidades autónomas del vehículo.
Los afortunados pasajeros del futuro BMW podrán leer un libro o simplemente ponerse al día con la última serie de streaming, con todos sus dispositivos conectados al auto, ya sean smartphones, tablets o smartwatch.
El sistema de copiloto virtual de BMW permitirá que el conductor delegue el control del vehículo a la inteligencia artificial, pero este último siempre tendrá la palabra final con la posibilidad de que se pueda relajar en ocasiones donde el tráfico resulte agobiante.
El tablero de instrumentos tradicional es reemplazado por un display que abarca toda la superficie del salpicadero con distinta información de utilidad tanto para el conductor como para los pasajeros y se podrá controlar mediante gestos con el sistema HoloActive Touch de la firma.
Otro aspecto a destacar es el sistema de sonido Personal BMW Sound Curtain que le permite a los pasajeros del sector delantero escuchar distinta música al mismo tiempo sin molestarse el uno al otro, con parlantes ubicados detrás de los oídos en cada asiento.
Por su parte Mercedes-Benz presentó sus últimos avances tecnológicos en un stand de 600 metros cuadrados en el CES con el foco puesto en las tendencias de conectividad, manejo autónomo, modelos de uso flexible y sistemas de propulsión eléctrica.
"Nuestra noción de la movilidad cambiará de manera más dramática en los próximos 5 a 10 años que en el pasado medio siglo" aseguró Ola Källenius, miembro de la junta directiva de Daimler AG. El directivo afirmó que el objetivo de la empresa será hacer del automóvil una plataforma para futuros conceptos de transporte y un espacio para albergar la experiencia digital.
Los autos del futuro serán conectados, autónomos, libres de emisiones y compartidos. Un claro ejemplo de esto es la alianza entre el creador del automóvil alemán con Google, que permite combinar el servicio de Google Assistant con los carros de lujo de la estrella.
La posibilidad de calentar el auto sin salir de la casa en una mañana fría, revisar el combustible disponible son sólo el principio de una infinidad de soluciones de inteligencia artificial aplicadas a los automóviles.
Por su lado, Volkswagen mostró por primera vez en Norteamérica el vehículo concepto I.D. un adelanto del modelo completamente eléctrico que saldrá a la venta en 2020 con una opción de manejo autónomo disponible para 2025.
El estudio de diseño combina las cuatro áreas de innovación de la firma: conectividad, facilidad de uso, sustentabilidad y automatización.
Además se pudo ver el nuevo tablero de instrumentos digital en tres dimensiones que combina las tecnologías del futuro con una experiencia intuitiva de fácil interacción.
Bautizado Digital Cockpit, el sistema se centra en dos pantallas situadas una detrás de la otra para generar un efecto 3D de gran profundidad. La excelente calidad de los gráficos hace que aprender a familiarizarse con los comandos resulte muy sencillo.
La tecnología de seguimiento ocular permite identificar donde está mirando el conductor dentro del vehículo, para poder reducir la cantidad de información desplegada y así evitar distracciones y fatiga visual.
Muchas de las tecnologías vistas en el CES aplicadas al mundo de los vehículos de pasajeros serán aplicadas a modelos de producción en el corto plazo, en primera instancia en modelos de alta gama para luego ir permeando a los segmentos más accesibles.
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