El popular videojuego de realidad aumentada Pokémon Go desembarcó en Medio Oriente y ya tiene seguidores en la región, pero instituciones religiosas musulmanas condenaron su uso, que también despierta temores relativos a la seguridad en los países árabes.
Al Azhar, institución de referencia para el islam suní, prohibió el uso del videojuego, el cual aún no está disponible oficialmente en Egipto, pero los usuarios ya han empezado a obtenerlo de forma clandestina.
El vicejeque de ese órgano religioso, Abás Shumán, aseguró en declaraciones a la agencia de noticias EFE que el juego es igual que el alcohol, prohibido por el islam, porque "daña la conciencia de los seres humanos".
Por su parte, algunas voces en Egipto han apuntado la posibilidad de que el videojuego pueda ser empleado para espiar y obtener información sensible sobre el país, que suele tener sospechas y temores en este sentido.
Debido a las duras medidas de seguridad, para los usuarios egipcios y de otros países árabes podría ser arriesgado adentrarse en la realidad aumentada de Pokémon Go, ya que apuntar con una cámara a un edificio gubernamental o a una patrulla policial puede llevarles a la cárcel.
En Emiratos Árabes Unidos (EAU) las autoridades han expresado sus reservas por los riesgos que implica el videojuego, tanto para los jugadores como para la seguridad del Estado. La Policía de Dubái ha advertido de que "terceras partes" pueden emplear el juego virtual para "introducir ideas venenosas en la mente de los jóvenes".
A tres de ellos se les negó la entrada al zoo de la ciudad emiratí de Al Ain, adonde querían acceder para buscar a Pikachu coincidiendo con la jornada dedicada a las mujeres en el lugar de recreación.
Por su parte, la Autoridad General de Telecomunicaciones emiratí advirtió de que el acceso de la aplicación electrónica a la ubicación y a la cámara del teléfono del usuario supone una violación de su privacidad.
Asimismo, alertó de que las versiones pirateadas de Pokémon Go, que todavía no está disponible en EAU, pueden ser usadas por delincuentes para conducir las víctimas a lugares remotos y robarles sus pertenencias.
Los jordanos tampoco pueden descargase legalmente la aplicación, pero algunos de ellos ya disfrutan de él en su país. Sin embargo, por el momento, los únicos comentarios al respecto han sido bromas difundidas en las redes sociales. "Esperemos que los pokemons hagan salir a todos los árabes a las calles e ir a la mezquita de Al Aqsa (en Jerusalén Este), para que descubran que está ocupada por los judíos", reza una de ellas.
Finalmente, en Arabia Saudita, la Comisión de la Fatua, la institución religiosa oficial del país que emite dictámenes islámicos, recordó que en un edicto de 2001 advirtió de que el juego está prohibido en el islam.
Según la comisión, esto se debe a que promueve "faltas a la religión como el politeísmo, las apuestas, la infidelidad a Alá e imágenes ilícitas, así como ganar dinero de manera deshonesta". Además, "este juego amenaza los datos y la privacidad de los usuarios, ya que pueden ser usados en contra de sus intereses", indicó la Corporación de Comunicaciones y Técnica Informática del reino saudí.
Pokémon Go ha cosechado un enorme éxito desde que salió al mercado el pasado 6 de julio y ya está disponible en 35 países, en algunos de los cuales ha ocasionado incidentes.