Rusia pone un pie en Irak: le vendió 73 tanques T-90 para continuar su campaña contra el ISIS

El contrato de 1.000 millones de dólares es el primero de varios que celebrarán Moscú y Bagdad, que aún debe expulsar a los yihadistas de tres regiones del país. El gobierno de Vladimir Putin ha utilizado su intervención militar en Siria para exponer sus nuevas armas y le está quitando mercado e influencia a Estados Unidos

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El T-90 modernizado es la columna
El T-90 modernizado es la columna vertebral de las divisiones blindadas rusas, pero no es el tanque más moderno de Moscú (Reuters)

El gobierno de Rusia firmó un contrato para la entrega de más de 70 carros de combate T-90 al ejército de Irak, que tras expulsar al grupo terrorista Estado Islámico (ISIS, en inglés) de Mosul retomó su campaña para derrotar a los yihadistas en el resto del país, según confirmó este jueves un funcionario del Kremlin.

Vladímir Kozhin, asesor del presidente ruso Vladimir Putin para la cooperación técnica y militar, dijo al diario Izvestia que "es un buen contrato para una partida grande", aunque no especificó la cantidad.

Sin embargo, la corporación estatal Uralvagonzavod informó con anterioridad de que la primera partida será de 73 vehículos, según destacó la agencia EFE.

Kozhin comentó que otro país interesado en comprar los T-90 es Kuwait, aunque por el momento "el diálogo sobre este contrato continúa".

Tropas iraquíes celebran la victoria
Tropas iraquíes celebran la victoria en Mosul, pero aún quedan tres regiones del país controladas por el ISIS(AFP)

Según el periódico, el suministro de más de 70 tanques es sólo el primer lote de equipos, sin embargo el Servicio Federal de Cooperación Técnica y Militar de Rusia no brindó al medio más detalles de la transacción.

Según expertos citados, el contrato firmado con Bagdad está valuado en más de 1.000 millones de dólares, y el total de vehículos blindados que serán exportados al país árabe asciende a varios centenares.

El Ministerio de Defensa de Irak ya había adelantado su interés de comprar del nuevo equipamiento ruso, en especial luego de observar su participación en en la guerra civil en Siria.

Las Fuerzas Armadas de Irak se encuentran además en medio de una campaña para expulsar al ISIS del país, que aún retiene tres zonas a pesar de haber perdido Mosul, su bastión y la ciudad más populosa que los yihadistas lograron capturar, y el jueves tomaron el pueblo de Emam Garbi en la región de Al Qayara.

El gobierno de Vladimir Putin
El gobierno de Vladimir Putin ha aprovechado la intervención militar rusa en Siria para mostrar sus armas modernas y obtener contratos de venta

Por su parte Putin ha exhortado a los militares del país a aprovechar al máximo las posibilidades de negocio abiertas tras demostrarse "la eficacia de las armas rusas en Siria", donde, según reportes de la Defensa, Moscú ha probado más de 160 de sistemas nuevos y modernizados.

Específicamente el T-90 entró en servicio en 1993 y su versión más moderna data de 2004. De cualquier manera, es un desarrollo del antiguo T-72, diseñado en la década de 1960.

Esta nueva compra significa una vuelta de Irak a los sistemas de armas rusos, que equipaban completamente al ejército de Saddam Hussein. En los últimos años Baghdad había comenzado a adquirir equipo estadounidense, como el tanque M1 Abrams, pero tras perder gran parte de este en su lucha contra el ISIS parece ahora volver a la esfera de Moscú.

Si bien es la columna vertebral de las divisiones blindadas rusas, el T-90ha sido superado en tecnología por el innovador es el T-14 Armata, un futurista diseño cuyas capacidades reales se desconocen.

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