Un conductor de nacionalidad sueca que conducía un camión de butano hacia el centro de la ciudad fue interceptado a los tiros por la policía cuando iba en contramano por la Ronda Litoral de Barcelona. El vehículo había sido robado minutos antes y fue perseguido por los agentes. El detenido, Joakim Robin Berggren, no resultó herido.
Berggren robó el camión a las 10:40 en la calle Vilá Vilá mientras el responsable repartía las bombas de gas. Durante la persecución, el camión perdió algunas bombonas de butano por el camino que hirieron a por lo menos una mujer. También chocó con algunos coches en el camino, hasta que un policía de la Guardia Urbana disparó al menos dos veces contra la luneta del vehículo y logró detener su marcha. El sueco de 32 años de edad bajó con las manos arriba y fue arrestado.
Fue trasladado al hospital Pere Camps para ser sometidó a exámenes médicos y psicológicos. Al parecer, contaba con antecedentes psiquiátricos y, por su comportamiento, testigos alegan que probablemente estaba bajo la influencia de drogas.
Según Joan Carles Molinero, comisario jefe de los Mossos en Barcelona, la unidad responsable de las investigaciones relacionadas con el terrorismo, "no hay indicios razonables que hagan pensar que es un ataque terrorista".
El responsable será interrogado hoy a la tarde.