El ex premier de Italia Silvio Berlusconi deberá volver ante la Justicia de su país y responder por las acusaciones de haber comprado con 10 millones de euros el silencio, o la reticencia, de 22 chicas vinculadas al caso Ruby.
La acusación contra Berlusconi, de 80 años, fue planteada en el marco del proceso Ruby ter por los fiscales de Milán que investigan esos presuntos sobornos. Según el abogado defensor del ex premier, Federico Cecconi, las chicas obtuvieron el dinero como un "acto de generosidad" porque vieron su vida "arruinada" ante el clamor de los procesos judiciales contra Berlusconi.
En cambio, según las acusaciones, el dinero estaba destinado a las jóvenes para que en sus declaraciones a la Justicia convirtiesen a las veladas "hot" transcurridas en la mansión San Martino de Berlusconi en simples "cenas elegantes".
Del total de €10 millones, € 7 millones —se afirma en la acusación— estaban destinados a la joven marroquí Karima El Mahroug, conocida como "Ruby robacorazones". El proceso comenzará el próximo 5 de abril ante un tribunal de Milán.
La semana pasada Berlusconi había recibido nuevas malas noticias de la Justicia italiana, que lo acusó de haber seguido pagando a cuatro chicas incluso hasta hace dos meses atrás.
Según la Fiscalía de Milán, las cuatro jóvenes (Elisa Toti, Aris Espinosa, Miriam Loddo y Giovanna Rigato) habrían recibido el dinero en efectivo a través de Giuseppe Spinelli, el contador de confianza de Berlusconi.
El contador, recordó la prensa local, se había ocupado del pago de las mujeres que participaron en las veladas que terminaron bajo la lupa de los fiscales.
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