Arqueólogos chinos quedaron estupefactos cuando desenterraron, el último viernes, una antigua espada en perfecto estado de conservación, con filo y brillo, lista para ser utilizada como un arma letal.
El arma tradicional china fue encontrada dentro de un antiguo féretro en la provincia de Henan y, luego de desenvainarla, descubrieron que la reliquia de 2.300 años de antigüedad estaba intacta.
Se cree que la espada pertenece al período que va entre los años 475 y 221 antes de Cristo de los estados guerreros chinos. Permaneció durante siglos a la izquierda del cuerpo de su propietario y volvió a ver la luz cuando los arqueólogos recuperaron el féretro en sus excavaciones de la ruinas de la ciudad de Chengyang.
El 30 de diciembre, después de remover el barro y limpiar la vaina, los arqueólogos fueron quitando con cuidado la espada de su interior, temiendo que hubiera apenas frágiles restos. Pero lo que apareció fue una hoja reluciente en perfecto estado de conservación y con su capacidad letal intacta, lo que demuestra el alto grado de desarrollo que habían alcanzado los artesanos chinos de la antigüedad en la confección de sus armas.
Chengyang es la ciudad antigua más grande y mejor preservada del antiguo reino de Chu. Está ubicada a 25 kilómetros de la ciudad de Xinyang, en la provincia de Henan.