Driton Selmani es un aficionado a los autos deportivos que siempre soñó con tener un Lamborghini, pero como muchos no tenía el dinero suficiente. Lo que sí tenía, no obstante, era un taller, tiempo y el talento para trabajar metales. Así que decidió construir su propia versión del deportivo italiano.
Residente en la ciudad de Gjilan, en el este de Kosovo, Selmani se basó en un Mitsubishi Eclipse, el motor de un Mitsubushi Galant de 3.0 litros y otras partes para hacer realidad su sueño.
Le tomó más de un año, pero el resultado es una réplica blanca de un Lamborghini Reventón con una franja negra y roja que simboliza la bandera de Albania. La amplia mayoría de la población de Gjilan, una ciudad que vio lo peor de la Guerra de Kosovo entre 1998 y 1999, es albanesa.
El Lamborghini de Selmani tiene una potencia nada despreciable de 200 caballos de fuerza, pero aún así se encuentra muy por debajo de los 650 que ofrece el original italiano, que puede acelerar de 0 a 100 Kilómetros por hora en 3,4 segundos.
Pero más allá de este desfasje el aficionado tiene el consuelo de haberse ahorrado los 1,6 millones de dólares que cuesta un Reventón, cuya produccción entre 2007 y 2009 sólo alcanzó las 20 unidades.
En tanto en el mundo ya existe un mercado para las réplicas de autos costosos como los Lamborghini, que se venden por apenas una fracción del costo de los originales.
Selmani dijo a la agencia AP que el coche ha sido bien recibido por familiares y amigos y atrae miradas cada vez que lo conduce.
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