El cultivo de opio en Afganistán, el mayor productor mundial de la sustancia, creció un 10 por ciento en 2016 hasta alcanzar las 201.000 hectáreas, debido principalmente al aumento de la inseguridad con el recrudecimiento del conflicto, según un informe presentado este domingo por el Gobierno afgano y la ONU.
"El aumento del 10% en el cultivo de opio se debió a la inseguridad. La mayor parte de las plantaciones se concentraron en áreas controladas por los talibanes y zonas inseguras y de difícil acceso", dijo el ministro afgano de Antinarcóticos, Salamat Azimi, en la presentación del estudio en Kabul.
La zona norte del país, donde los insurgentes ganaron terreno en los últimos meses, registró un fuerte aumento en el cultivo de adormidera, de acuerdo con la Encuesta de Opio en Afganistán 2016, realizada por el Ministerio de Antinarcóticos afgano y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD).
A pesar de ello, la mayor parte de la producción se concentró en la región sureña, la cuna del movimiento talibán y tradicionalmente la principal zona de dominio insurgente.
Según el informe, la producción potencial de opio alcanzó este año las 4.800 toneladas, un 43 por ciento más que el año anterior, cuando se situó en las 3.300 toneladas. Además, creció el tamaño de la cosecha recolectada por hectárea.
Como ya adelantó a principios de mes el director de la ONUDD, Yury Fedotov, durante una conferencia en Bruselas para recaudar fondos para Afganistán, la erradicación de esta sustancia quedó prácticamente paralizada en 2016.
"Debido a la inseguridad la mayoría de las fuerzas de seguridad estuvieron ocupadas en operaciones antiterroristas, este año no pudimos destruir más plantaciones de opio", explicó el viceministro de Antinarcóticos, Baz Muhammad Ahmadi. La erradicación cayó, en concreto, un 91 por ciento, de las 3.760 hectáreas destruidas en 2015 a apenas 350 este año.
El pasado año, el país registró su primer descenso en la producción de esta droga en cinco años, con unas 183.000 hectáreas cultivadas con este fin, aunque en 2014 había registrado un aumento récord hasta las 224.000 hectáreas.
Afganistán es el principal productor de adormidera del mundo y en 2012 el 75 por ciento de la heroína mundial procedía de este país, en el que según datos de la ONU los ingresos que genera el opio financian el 15% de las actividades de los talibanes.
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Con información de EFE