Estados Unidos bombardeó el jueves tres radares pertenecientes a las milicias chiitas hutíes en Yemen tras el lanzamiento de misiles contra el destructor estadounidense USS Mason, informó el Pentágono.
"Las primeras evaluaciones muestran que fueron destruidos", aseguró el Departamento de Defensa de EEUU, en un comunicado emitido en las últimas horas en el que informó de que los ataques con misiles Tomahawk "en defensa propia" fueron autorizados por el presidente, Barack Obama.
"Los objetivos de los ataques fueron radares que participaron en el reciente lanzamiento de misiles que amenazó al USS Mason y otros busques que operan en aguas internacionales del mar Rojo y el estrecho de Mandeb", apuntó el Pentágono.
El USS Mason detectó este miércoles por segunda vez en cuatro días el lanzamiento de un misil desde territorio hutí, que en ningún caso impactó en el buque o causó heridas a la tripulación, ya que los EEUU desplegaron contramedidas defensivas.
En la nota del Pentágono se advierte que EEUU "responderá" a cualquier amenaza futura "según corresponda" para proteger a su "personal, buques y libertad de navegación en ese importante corredor marítimo".
Sin embargo, los rebeldes negaron el jueves haber estado detrás del lanzamiento de misiles.
Supuestos aliados de Irán, los hutíes están siendo atacados por una coalición liderada por Arabia Saudita y en la que contribuyen los Estados Unidos desde la primavera de 2015.
Los hutíes parecen haber aumentado su beligerancia con lanzamientos de misiles a territorio vecino en Arabia Saudita y navíos militares, tras el ataque aéreo saudí a un funeral en la capital yemení, Saná, en el que fallecieron 140 personas.
En tanto, Riad lidera una coalición árabe que participa activamente en la guerra civil en Yemen bombardeando posiciones de los rebeldes hutíes, en apoyo del gobierno del presidente Abdrabbuh Mansour Hadi.
Con información de EFE.
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