La tarea de reclutamiento del Estado Islámico (ISIS, por su sigla en inglés) se expande alrededor del mundo. Jóvenes de 86 países viajaron a Siria e Irak para sumarse al ejército de la organización terrorista. Son, en su mayoría, muy educados y pertenecen a familias de buen pasar económico según un informe que acaba de presentar el Banco Mundial a partir del análisis de más de 22 mil documentos.
Los formularios filtrados a la inteligencia alemana por un desertor de ISIS, muestran los datos básicos (nombre, lugar de nacimientos, nivel educativo, entre otros) de 3.803 aspirantes extranjeros que se sumaron al Estados Islámico entre 2013 y 1014.
El estudio encontró que el 69% declaró tener, al menos, estudios secundarios, y un cuarto del total tenía estudios universitarios. Sólo el 15% dejó la escuela antes del secundario y menos del 2% era analfabeto.
El estudio comparó el nivel educativo de los reclutados con el de la población de entre 20 y 35 años de sus países de origen. Los combatientes de Europa y Asia Central tienen un nivel educativo similar al promedio de sus países. pero los provenientes de Oriente Medio, el norte de África y el este y sur de Asia son significativamente más educados que la mayoría de los jóvenes de su país.
Ante la pregunta de qué posición deseaban ocupar en ISIS, la proporción de los que elegían tareas directivas o de terroristas suicidas aumenta con la educación.
Mientras el reporte brinda una pintura de trazo grueso del perfil de los extremistas que dejan su país para enrolarse en el Estados Islámico, los investigadores piden cautela al advertir que se trata de la información que brindaron ellos mismos en el momento de su enrolamiento.
Los resultados, sin embargo, son consistentes con estudios previos que indican que el terrorismo no es fogoneado por la pobreza y bajos niveles educativos. También muestran que los países más ricos (medidos por PBI o por el índice de desarrollo humano) son también los mayores proveedores de combatientes de ISIS, en relación al tamaño de su población.
El informe del Banco Mundial advierte, en cambio, sobre la "fuerte relación" con la tasa de desempleo masculino en un país y su propensión a ser fuente de combatientes terroristas. Por eso, el trabajo concluye con un pedido a los funcionarios de los distintos países para que encaren políticas de creación de empleos entre las personas más educadas como parte de sus políticas anti-terroristas.
LEA MÁS: