Un ataque aéreo de la coalición árabe-saudí provocó 16 civiles muertos y varios heridos en la ciudad yemení de Saada, al norte del país.
Los bombardeos destruyeron dos viviendas en el distrito Baqam de Saada, un bastión de los rebeldes chiíes conocidos como hutíes, según indicó la agencia SABA, que es controlada por los rebeldes.
Entre los muertos había mujeres y niños. Los rebeldes señalaron que la presencia de los aviones de la coalición obligó a demorar las tareas de rescate por sobrevolar varias veces la zona. Algunos de los heridos estaban en estado crítico, lo que podría aumentar la cifra de muertos con el pasar de las horas.
Los ataques se produjeron durante la noche y un día después de que Naciones Unidas pidiera una investigación internacional sobre las muertes de civiles en Yemen. El canciller iraní, Javad Zarif, rechazó las denuncias de Arabia Saudita de que su país le entregó misiles y armamentos a los rebeldes yemeníes.
Habitantes del barrio Al Baraka, donde se ubicaba el hogar de las víctimas, dijeron a la agencia EFE que todavía prosigue la retirada de escombros para recuperar los cadáveres.
En otro bombardeo de la coalición, registrado anoche en el norte de la capital Saná, cuatro civiles perdieron la vida. Estos ataques tuvieron como blanco viviendas del barrio Al Rauda, próximas a la Academia Militar, que es bombardeada desde ayer, según testigos.
Los estallidos de los bombardeos sacudieron los barrios del norte de Saná, mientras que columnas de humo negro se elevaron desde la Academia.
El director de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios en el Yemen (OCHA), Jamie McGoldrick, informó que alrededor de 10.000 personas murieron en el conflicto en esa región desde marzo de 2015.
Tres millones de personas se vieron forzadas a abandonar sus hogares y a desplazarse a otras zonas del país, mientras que unas 200.000 huyeron del Yemen.
El conflicto estalló cuando el movimiento rebelde de los hutíes ocupó en septiembre de 2014 la capital yemení y otras provincias del país, lo que obligó al presidente, Abdo Rabu Mansur Hadi, a huir a la ciudad meridional de Adén y de ahí a Riad, donde reside junto a los integrantes de su Gobierno.
Fuente: AP/EFE