El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, celebró este lunes la salida del Estado Islámico de la ciudad siria de Manbij y se marcó como próximo objetivo, el bastión y capital de facto de los yihadistas: Raqqa.
"El éxito de Manbech ayudará a reforzar el aislamiento de Raqqa y nos permitirá alcanzar nuestro nuevo objetivo en la campaña en Siria, derribar el control de ISIS sobre la ciudad", aseguró Carter en un comunicado.
Manbij fue liberada la semana pasada semana con los avances de la coalición kurdo-árabe de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD) con apoyo aéreo y de inteligencia de la misión liderada por Estados Unidos contra ISIS en Siria e Irak.
"Este éxito, habilitado por el apoyo crítico de la coalición, es otro hito en la campaña para asestar al Estado Islámico una derrota duradera", señaló Carter, que felicitó por su contribución al "Consejo Militar de Manbij", así como a las fuerzas locales apoyadas por Washington para arrebatar terreno a los yihadistas en Siria.
Carter agradeció el apoyo a las fuerzas turcas en la toma de Manbij, en el norte de Siria y al oeste del río Éufrates.
Estados Unidos consideraba a Manbij una plaza clave del EI para mantener el tráfico de combatientes extranjeros desde Turquía a Raqqa y las líneas del frente en Siria e Irak.
Estados Unidos sigue sin adelantar cuándo podrían producirse dos de las batallas claves en la lucha contra ISIS, la ofensiva terrestre contra Raqqa y Mosul (Irak), desde hace dos años en manos de los yihadistas.
Con información de EFE