La mayoría de las celebridades de Hollywood hacen todo lo posible para ocultar las señales de la edad, pero Mel Gibson, de 60 años, luce una barba blanca y espesa. Lo hace parecer más sabio. Él asegura que eso es así. "Trabajé mucho en mí. Soy una persona diferente a la que era".
El protagonista de Arma Mortal y de tantos otros éxitos cinematográficos regresó cuando todos pensaban que ya estaba en el ocaso de su carrera. Y lo hizo a lo grande. Por el drama bélico Hacksaw Ridge, protagonizado por Andrew Garfield y Vince Vaughn, Mel Gibson recibió dos nominaciones a los Globos de Oro, uno por mejor película y otro como mejor director.
Estos son algunos de los escándalos que han ido enterrando la imagen del que fue uno de los actores favoritos tanto del público como de la industria.
En 2006 fue detenido en Malibú conduciendo su auto en estado de ebriedad e insultó al agente que lo arrestó con expresiones antisemitas. "Los putos judíos son los culpables de todas las guerras de la Humanidad (…)¿Qué pasa, eres judío?", fue el improperio de Gibson al policía.
"Me había tomado ocho tequilas dobles". Así con esta frase intentó justificar su vergonzante comportamiento y desafortunado comentario. No le quedó otra alternativa que pedir disculpas a la colectividad judía: "Por favor, sepan que, de corazón, no soy antisemita. No soy un intolerante".
Pero- al parecer- no fue suficiente. Ese mismo año, durante un segundo arresto por conducción en estado de ebriedad, Gibson atacó nuevamente a un agente. En esta ocasión recurrió a la amenaza. "Voy a joderte, soy el dueño de Malibú", le dijo y luego la desafió: "¿Qué miras, tetitas dulces?".
Hasta el humorista Ricky Gervais durante los Globos de Oro de este años e rió de él frente a todos sus colegas: "Lo único bueno que puedo decir es que preferiría tomarme una copa con Mel antes que con Bill Cosby", le dijo para después susurrarle al oído: "¿Qué m… significa tetitas dulces?".
La Pasión de Cristo, ¿el principio del fin?
Tras su estreno en 2004 fueron muchos lo que criticaron el tratamiento que el cineasta y actor daba a los judíos en la controvertida cinta, que además fue calificada como "excesivamente violenta y sangrienta".
Racista, violento y misógino
El ganador del Oscar fue noticia en 2010 por los agresivos y amenazantes audios que le envió a su entonces novia, la pianista rusa Oksana Grigorieva, luego de haberla golpeado mientras ella sostenía a la hija recién nacida de ambos en brazos. "Si te violan un montón de negros será tu culpa" , le decía Gibson en un ataque de furia a Grigorieva, de quien se separó en 2011 luego de que su ex pidiese una orden de restricción.
En 2012, Gibson intentó volver, pero lo volvió arruinar. Fue acusado de antisemitismo por el guionista de Hollywood Joe Eszterhas, quien decidió publicar una dura carta abierta contra el cineasta. "He llegado a la conclusión de que la razón por la que usted no hace ´Los Macabeos´ es que odia a los judíos", afirmaba Eszterhas en su extensa misiva.
El guionista fue objeto de uno de los ataques de ira del actor y todo quedó registrado en una grabación que dio a conocer el famoso sitio TMZ.
"¿Por qué no tengo un primer borrador de The Maccabees? ¿Qué m…has estado haciendo?", espetaba el director a Eszterhas. En el audio filtrado también criticaba a Oksana Grigorieva. "Estoy ganando dinero para una mugrienta hija de …. que se aprovecha de mi", gritaba Gibson, en referencia a Grigorieva. La cinta fue cancelada tras la filtración de este material.
En busca del perdón
Después de una década en el ostracismo y desenfreno-en el que fue la paria de Hollywood- parece que finalmente se serenó y se alejó de los estallidos racistas y antisemitas. No obstante, aún carece de autocrítica.
En una reciente entrevista, Gibson- que se convertirá en padre por novena vez- reconoció haberse sentido excesivamente castigado por su conducta y cree que las acusaciones que pesan sobre él sobre su antisemitismo son injustas. "Diez años no es justo", afirmó el director de Braveheart, que por sus exabruptos entró en la lista negra de Hollywood por casi una década.
Gibson vuelve ahora con Hacksaw Ridge, un trabajo con el que pretende ganarse el perdón definitivo y enterrar, de una vez por todas, los años más oscuros de su pasado. Tiene deseos de revivir. Cuando le consultan sobre su relación con Hollywood, él se describe como un "sobreviviente".