Tras el gran espectáculo de Justin Timberlake, se hizo presente en el escenario del Dolby Theather el anfitrión de la gala, Jimmy Kimmel.
Kimmel comenzó su monólogo molestando a Mat Damon, de quien se burló por darle a Casey Affleck el protagonismo en Manchester by the sea para liderar la cinta La Muralla que fue un fracaso en la taquilla.
El comediante también hizo referencia a la disputa de Donald Trump y Meryl Streep. Kimmel pidió una ovación para la "sobrevalorada" Streep, quien se mostró muy conmovida por los aplausos de todos sus colegas.
Luego apuntó contra Trump y le "agradeció " al presidente de los Estados Unidos "por hacer que la entrega de este años sea menos racista".
"Quiero darle las gracias al presidente Trump. ¿Recuerdan el año pasado cuando pareció que los Oscar eran racistas?", añadió en alusión a la nominación de actores solo blancos en los últimos dos años. También le preguntó a Streep si el vestido era de Ivanka, hijo del mandatario.
Antes de presentar el premio a Mejor maquillaje, Kimmel pidió que si había periodistas de CNN o del New York Time salieran del edificio ya que "no quieren noticias falsas", en referencia a la pelea de Trump con la prensa.
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