Niveles de exposición pública que hasta hace sólo unos años hubiesen sido condenados hoy son aplaudidos en la era actual de las redes sociales, que permiten que cualquier persona, más allá de su profesión, se convierta de la noche a la mañana en la nueva sensación online.
Tal es el caso de la agente de policía de origen dominicano Samantha Sepulveda, que trabaja de día asegurándose de que la comunidad de Freeport, Long Island, se mantenga segura, mientras que fuera de servicio explora su costado más sensual como modelo de ropa interior y trajes de baño.
Con un salario anual de 143.000 dólares y con más de siete años en servicio público, Sepulveda decidió hace cuatro años complementar sus ingresos como agente de policía posando como modelo, en un rol completamente opuesto al de agente de la ley.
Con más de 137.000 seguidores en la red social Instagram, la despampanante oficial nacida en República Dominicana, que llegó a los Estados Unidos junto con su familia a los cinco años en busca de mejores oportunidades, se ha convertido en una sensación online, lo que ha generado entrevistas con la cadena hispana Univision y el New York Post, entre otros medios de los Estados Unidos.
Sepulveda asegura que sus dotes físicos logran que los sospechosos caigan rendidos a sus pies, sin siquiera tener que forzarlos para arrestarlos. "Simplemente los convenzo a ser esposados, dado que no quieren pelear conmigo", compartió al New York Post.
La dominicana afirma que muchos le gritan en las escenas del crimen: "Me puedes arrestar cuando quieras", algo que —asegura— facilita su trabajo diario, dado que genera un vínculo diferente con la comunidad al que suelen construir sus colegas del género masculino.
"Con agentes mujeres, suelen bajar la guardia, hay menos agresión y la situación se descomprime", compartió y mencionó un ejemplo en el que un hombre que había maltratado a su esposa y se encontraba escapando de los agentes de la ley, al verla simplemente se quedó paralizado y le ofreció invitarla a cenar mientras ella lo esposaba.
Sepulveda se unió a las fuerzas de la ley en 2010, y tres años más tarde, una amiga la invitó a desfilar sobre una pasarela en ropa interior. Ese momento marcó el inicio de una fructífera carrera paralela para la policía, que la llevó a viajar por el mundo a destinos como el Reino Unido, España, Australia y Nicaragua.
A pesar de que en un comienzo las osadas fotos compartidas en redes generaron cierto rechazo, la agente de la ley convertida en modelo asegura que éstas buscan celebrar la belleza femenina, y compartió que muchos de sus colegas masculinos complementan sus ingresos como plomeros y electricistas sin ser juzgados.
Asegura que sabe marcar las diferencias en sus distintos roles y ámbitos de trabajo, mantieniendo el profesionalismo, y que cualquiera que se sienta ofendido puede decidir simplemente cerrar los ojos y no ver sus fotos.
Becada por sus habilidades extraordinarias en Lacrosse por la Universidad de Massachusetts y graduada con honores en Administración de Empresas, no paró hasta obtener su MBA en Finanzas en la prestigiosa Universidad Hofstra.
Con una clara vocación comunitaria, decidió convertirse en policía en vez de agente bursátil en Wall Street, algo que seguramente le hubiese representado jugosos ingresos anuales, pero la hubiese alejado de su objetivo: proteger desde el servicio cívico.
Sepulveda se encuentra trabajando en una colaboración para construir plantas energéticas sustentables en Tailandia, aprovechando sus conocimientos financieros, lo que pone en evidencia las aspiraciones sin límites de la policía y modelo más popular de Instagram.