El domingo por la madrugada Kim Kardashian fue asaltada a punta de pistola en el exclusivo apartamento que rentaba en París. Fue atada y encerrada en un baño de la residencia. Los delincuentes lograron hacerse con dos smartphones y joyas por un valor estimado en USD 10 millones.
El Ministerio del Interior francés informó que cinco hombres armados y disfrazados de oficiales de policía amenazaron al conserje del complejo con un arma, lo esposaron y lo obligaron a abrir el apartamento privado.
Entre los objetos robados están un anillo, valorado en USD 4,49 millones y un joyero por valor de USD 5,6 millones, de acuerdo a la fiscalía de París.
Kardashian- quien ya se encuentra en Nueva York junto a Kanye West- teme que el contenido almacenado en los celulares que le sustrajeron pueda filtrarse en internet. Al parecer, los dispositivo contaban con imágenes muy personales de Kim, su marido y sus dos hijos.
No hay que olvidarse que la protagonista del reality Keeping up with Kardasahian , de 34 años, es conocida por quitarse selfies al desnudo y compartirlas con sus millones de seguidores en las redes sociales.
La estadounidense también tiene pánico de que se den a conocer mensajes explícitos de ella con el rapero. En el caso de que los criminales logren acceder esa información podrían extorsionar a la famosa pareja.
Kardashian había viajado a la capital francesa para asistir a la Semana de la Moda y ya había participado de los desfiles de Balenciaga y Givenchy. Estaba acompañada por sus hermanas Kourtney y Kendall Jenner, que estaban de fiesta en un club nocturno cuando ocurrió el episodio.
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