La serie más popular del momento, 'Game of Thrones', no es perfecta. Los 10 millones de euros que ha costado cada capítulo en promedio en la sexta temporada no fueron suficientes para evitar que se produzcan fallos ante unos seguidores demasiado exigentes.
A lo largo de sus seis temporadas se produjeron fallos de guión dignos de las producciones más humildes. El último error se produjo en el noveno capítulo de la sexta temporada, durante la batalla de los bastardos.
Como se pueden ver en los gifs que corren por las redes sociales o por los vídeos de YouTube, durante un instante, cuando Jon Snow se monta en el caballo para salvar a su hermano Rickon, una sacudida deja en evidencia el material del que está hecha la espada de supuesto acero Valyrio. Las imágenes muestran cómo la vaina de Jon Snow, aún con la espada dentro, se dobla como si de cartón se tratase.
Uno de los mayores problemas de la serie son los viajes que realizan los personajes a lo largo del fantástico mundo de 'Juego de Tronos'. Mientras que unos tardan capítulos y capítulos en hacer viajes relativamente cortos, otros parecen teletransportarse de un extremo al otro del mapa en cuestión de minutos. Es lo que ocurrió en el último capítulo. Varys apareció en Dorne para dar su apoyo a la Reina de las Espinas y a Ellaria Arena y pocos minutos después ya se encontraba en un barco junto a Daenerys, lo cual significa que le había dado tiempo a ir a Meereen y dirigirse con sus compañeros a Westeros, en el que había estado presente unos instantes antes.
Uno de los guionistas de la serie ha salido al paso de las críticas y ha aclarado el asunto en su cuenta de Twitter. "Las líneas de tiempo de las diferentes tramas e historias no coinciden necesariamente todo el tiempo", dijo Bryan Cogman. "Esto sirve para evitar cosas como, por ejemplo, que Arya pase cuatro episodios a bordo de un barco", añadió el guionista.