El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, señaló este miércoles que el dictador norcoreano había tomado una decisión "muy sabia" y "racional", presuntamente con respecto a desistir de su ataque sobre la isla de Guam, un territorio estadounidense en el Pacífico.
"¡La alternativa hubiera sido tanto catastrófica como inaceptable!", exclamó en su cuenta de Twitter.
Kim Jong Un of North Korea made a very wise and well reasoned decision. The alternative would have been both catastrophic and unacceptable!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) August 16, 2017
Guam ha estado en el foco de las crecientes tensiones entre Washington y Pyongyang luego de que Kim Jong Un amenazara la semana pasada con un posible lanzamiento de cuatro misiles hacia la isla del Pacífico como "advertencia", previsto para mediados de agosto.
Ayer el territorio en cuestión vivió un momento de pánico cuando dos estaciones de radio emitieron "por error" una alerta por un ataque inminente, que luego fue desmentida.
Y el secretario de Defensa, James Mattis, advirtió también que "si ellos disparan contra los Estados Unidos, eso podría escalar a una guerra muy rápido".
Pero el lunes, el mismo dictador ya había parecido moderar su posición al señalar que "los Estados Unidos deberían tomar la decisión correcta y mostrar a través de sus acciones si quieren aliviar las tensiones en la Península de Corea y prevenir un conflicto militar peligroso", que fue interpretado como una pausa para observar la próxima movida de Trump.
Del otro lado, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, destacó el martes ante la prensa que su país seguía "interesado en encontrar una forma de llegar a diálogo, pero depende de él", expresó en referencia a Kim Jong Un.
La prueba de esta distensión tendrá lugar, sin embargo, el lunes, cuando está pautado el inicio de las maniobras militares entre los Estados Unidos y Corea del Sur, uno de los principales focos de conflicto entre Washington y Pyongyang.
En tanto, la situación actual comenzó a gestarse hace dos semanas, cuando el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó más sanciones para la dictadura comunista debido a sus cada vez más frecuentes pruebas de misiles balísticos. También en ese momento, Trump había subido la apuesta prometiendo "fuego y furia" si estas pruebas continuaban.
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