Tardó varios minutos en encontrarlo. Incluso podría haberlo roto con la podadora o con el rastrillo. Pero cuando se percató de su presencia, el smartphone estaba intacto.
El dueño de casa, habitante de Nashville, Tennessee, le dijo a su hijo: "Aquí está tu teléfono". Al verlo, este le respondió: "No es mi teléfono… el mío está en mi bolsillo".
Entonces, el joven se dio cuenta de que estaba grabando. Cuando reprodujo el video no lo podía creer: el celular había terminado en el jardín tras caer de un avión.
Tras contactar a la empresa telefónica, lograron devolver el dispositivo a su dueño, Blake Henderson. Era él quien lo había sacado por la ventana de la aeronave en la que viajaba, para filmar a un avión que pasaba a algunos metros de distancia. Pero una inesperada turbulencia hizo que se le escapara de la mano.
El video fue publicado en YouTube por Robert Ryan, sobrino de Henderson. Según él, la caída fue de más de 300 metros, y sin embargo el smartphone estaba intacto.
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