Con su gobierno en gestación, el próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, analiza impulsar nueva diversidad entre los republicanos, al recomendar que una mujer presida el partido y que un hombre abiertamente homosexual represente a Estados Unidos ante la ONU.
Pese a ganar la elección, Trump no logró hacerse del voto popular, lo que lo inclinaría a buscar opciones que generen más consenso entre los sectores que se oponen a sus programas de gobierno, para buscar unidad en el país.
El magnate, que asumirá la Presidencia el próximo 20 de enero, sopesa proponer a Richard Grenell como el embajador de Estados Unidos ante la ONU, un cargo actualmente ocupado por John Bolton. Si es escogido al cargo y el Senado lo ratifica, Grenell se convertirá en la primera persona abiertamente homosexual que ocupe un puesto diplomático a nivel de gabinete.
Conocido en parte por ser un agresivo crítico de sus rivales en Twitter, Grenell ya fue vocero estadounidense ante la ONU durante el gobierno del George W. Bush.
Al mismo tiempo, Trump analiza seleccionar a la presidenta del Partido Republicano en Michigan, Ronna Romney McDaniel, sobrina de Mitt Romney, uno de los detractores del magnate y candidato presidencial en 2012. McDaniel podría convertirse en la segunda mujer en la historia y primera en cuatro décadas en encabezar al Comité Nacional Republicano.
"Me interesará cualquier cosa que desee el señor Trump", declaró McDaniel a la agencia AP y agregó que por lo pronto tiene pensado buscar de nuevo la presidencia del Partido Republicano en Michigan.
El nombrar a McDaniel para que encabece el brazo político del Partido Republicano podría ser un esfuerzo dirigido a que el organismo político supere la indignación suscitada por los comentarios machistas que hizo Trump durante la campaña.
Además, Grenell se ha expresado públicamente a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo, por lo que su nombramiento aplacaría las preocupaciones entre la comunidad homosexual ante las posturas conservadoras del vicepresidente electo Mike Pence sobre el tema.
Ambas propuestas, entre las decenas sopesadas por el equipo de transición de Trump, siguen a la intensa reacción adversa que suscitó la decisión del magnate de nombrar a Steve Bannon como su principal asesor, un personaje más cercano al movimiento nacionalista blanco.
Con información de AP
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