Las muertes de Alton Sterling y de Philando Castile indignaron al mundo. Pero sobre todo a la comunidad afroamericana de los Estados Unidos que anoche decidió salir a las calles para protestar por la brutalidad policial que según argumentan está alimentada por cuestiones raciales.
El 5 de julio Sterling, de 37 años, vendía discos fuera de un comercio en Baton Rouge, Lousiana, con el permiso del dueño del local. Sin embargo, se registró un altercado con dos policías que le dispararon mientras lo tenían controlado en el suelo.
Los videos del hecho comenzaron a emerger en pocos minutos y reflejaron lo que los medios norteamericanos calificaron como un "fusilamiento". La víctima estaba desarmada y bajo el control absoluto de los oficiales Blane Salamoni y Howie Lake. En un primer momento, los responsables de su muerte habían indicado que actuaron por la amenaza que les generó Sterling. Sin embargo, las grabaciones hechas con teléfonos celulares indicaron lo contrario.
Tan solo un día después, Castile, de 32, fue detenido por una patrulla de tráfico mientras conducía junto a su novia por el condado de St Paul, en Minnesota. Aparentemente, le indicó al policía que tenía un arma en forma legal en el automóvil, sin mostrársela.
El oficial le disparó en el pecho. La mujer que estaba junto a la víctima comenzó a transmitir por Facebook Live, mientras Philando agonizaba y el agente aún apuntaba su pistola. El video se viralizó en cuestión de horas y todo el mundo pudo observar a su novio muriéndose.
Ambos crímenes generaron una indignación global en los Estados Unidos que condujeron a movilizar a las calles a cientos de miles de personas. Bajo el lema "Black Lives Matter" (Las Vidas de los Negros Importan) la marcha más significativa se produjo en Minnesota. Sin embargo, en Dallas, lo que se creía una protesta pacífica se convirtió en una masacre, donde cinco policías fueron asesinados por al menos un francotirador que fue abatido.
"El sospechoso dijo que estaba molesto con (la manifestación pacífica) Black Lives Matter (Las Vidas de los Negros Importan). Y que estaba enojado por los recientes tiroteos policiales, y con la gente blanca. Dijo que quería matar blancos, especialmente oficiales blancos", aseguró David Brown, jefe de Policía de Dallas.