En un partido abierto y con muchas situaciones de gol, Alemania venció a Chile por la mínima diferencia y se consagró campeón de la Copa Confederaciones.
La primera situación del partido fue para Chile. Arturo Vidal filtró una pelota para Charles Aránguiz, que entró en velocidad al área, no se pudo sacar la marca de encima y de espaldas al arco volvió a buscar al mediocampista del Bayern Múnich, quien remató incómodo y no pudo superar al arquero Ter Stegen.
A los 19 minutos Vidal remató de media distancia, Ter Stegen respondió con un rebote largo que capturó Alexis Sánchez, pero el delantero del Arsenal falló de manera insólita en la definición.
En la jugada siguiente, Marcelo Díaz cometió un error garrafal en la salida. El delantero Timo Werner le robó la pelota, escapó mano a mano y tocó al medio para que Stindl defina para el 1 a 0.
A pesar del gol, Chile no modificó su forma de juego y mantuvo la presión alta. Pero con la ventaja en el marcador, Alemania creció y pudo conseguir el segundo tanto en un mano a mano que Claudio Bravo le tapó a León Goretka
En el complemento, ambos equipos tardaron en plantarse en el campo de juego y parecían extrañamente conformes con el marcador, sobre todo Chile, que bajó el ritmo.
La primera de riesgo fue para los germanos. El capitán alemán, Draxler, emprendió una corrida espectacular por izquierda y cuando buscó el disparo cruzado, apareció Gonzalo Jara, quien se arrojó al suelo y logró tapar su remate, que tenía el arco como destino.
La polémica del encuentro ocurrió a los 20 minutos del complemento cuando Gonzalo Jara le dio un codazo a Timo Werner y el árbitro serbio Milorad Mazic se apoyó en el VAR para amonestar al defensor chileno, quien debió haberse ido expulsado.
Chile pudo haber empatado el encuentro sobre el final. Sagal, que había entrado en el segundo tiempo, desaprovechó una clara situación de gol al quedar cara a cara con el arco y definir por arriba del travesaño. Además, en la última del partido, Ter Stegen le tapó un tiro libre fantástico a Alexis Sánchez.
Con este resultado, Alemania se coronó campeón por primera vez en su historia de la Copa Confederaciones con un equipo que no supera el promedio de edad de 23 años y que se prepara para afrontar el Mundial de Rusia 2018.
Chile, perdió su primera final con este plantel que conoció la gloria en 2015, cuando conquistó la Copa América en su país y que en 2016 se quedó con la Copa Centenario. En ambas oportunidades había vencido por penales a Argentina.
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