Caos y violencia en Grecia: una "lluvia de bengalas" obligó a huir al equipo visitante

Olympiacos recibió a Panathinaikos en la final del torneo de baloncesto heleno y los aficionados no toleraron que su histórico rival consiguiese el campeonato en el estadio del puerto del Pireo

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Se jugaba el último cuarto del quinto duelo de la final del campeonato de Grecia. Con el triunfo por 66-49 en condición de visitante, Panathinaikos se aseguraba el título ante su eterno rival, Olympiacos.

El público del conjunto local no toleró el resultado y lo que primero comenzó como una "fiesta" en las tribunas, que se colmaron de bengalas y bombas de estruendo, rápidamente se transformó en un caos.

Los simpatizantes de Olympiacos arrojaron los elementos pirotécnicos al banco de suplentes del equipo rival e inmediatamente el árbitro suspendió el partido.

Los jugadores visitantes huyeron hacia el vestuario para evitar las agresiones y festejaron el campeonato en los camarines, custodiados por la seguridad y lejos de los incidentes.

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