En plena disputa de los playoffs de la NBA, el lesionado ala-pívot Chris Bosh busca nuevos negocios. Pero la estrella de Miami Heat, que lleva más de un año inactivo, tampoco tiene suerte fuera de las pistas: fue demandado por una productora porno tras querer alquilarles su mansión en Los Ángeles.
Bosh, de 31 años, quien no ha jugado un partido de la NBA desde febrero de 2016 por culpa de unos coágulos de sangre que lo dejaron al borde del retiro, recibió una denuncia de los dueños de la firma X-Art, quienes pretendían filmar unas escenas y se encontraron con un escenario desagradable.
Según informaron varios portales de noticias estadounidenses, como por ejemplo TMZ.com, la productora de películas para adultos había rentado la enorme casa de casi 1.000 metros cuadrados en Pacific Palisades, junto a la playa y en una de las zonas más exclusivas de Los Ángeles, que le pertenece a Chris Bosh, ganador de dos anillos de campeón y once All Star disputados.
Colette y Brigham Field, dueños de X-Art, pagaron en diciembre más de 138.000 dólares por un mes: 46.000 de alquiler y 92.000 de fianza. Sin embargo, al llegar a la mansión, encontraron un caos repugnante: basura, hongos, excremento y ratas corriendo de un lado a otro.
Incluso, según los medios locales, tuvieron que buscar atención médica especializada ante posibles infecciones derivadas del deterioro de la residencia que pertenece a Bosh y a su esposa. Los demandantes pretenden que se les devuelva el dinero y se les otorgue una indemnización por daños y perjuicios.
El jugador, que aún no emitió respuesta, tiene contrato con Miami Heat hasta 2019, y embolsará 26 millones de dólares en cada una de las dos próximas temporadas, por lo que pagarle a la productora no sería un problema.
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