El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, prohibió la entrada a su país a los ciudadanos de Irán, Irak, Somalia, Yemen, Sudán, Siria y Libia, una medida que salpicó al mundo del deporte: Irán le prohibió el ingreso a dos jugadores de baloncesto estadounidenses.
Tras el decreto firmado por el nuevo mandatario, Irán le negó el regreso a Joseph Jones y J. P. Prince, quienes militan en la Universidad Azad de Teherán de la Super Liga iraní y no pudieron volver al país en el que residen tras unas vacaciones en Dubai, donde se encuentran "varados", según confirmó Eric Fleisher, el agente de ambos.
"Están a la espera de que se produzca un cambio en su estatus para regresar a Irán y finalizar la competición. En este punto, eso parece muy dudoso. Es muy posible que en los próximos días no tengan otra alternativa más que la de regresar a los EEUU", afirmó Fleisher a The Vertical.
After Iran retatliation to Trump ban, two American players stranded in the Middle East. @ChrisMannixYS report: https://t.co/bKd3I2MiRt
— The Vertical (@TheVertical) January 29, 2017
Jones, de 30 años, jugó en Texas A&M, y Prince, de 29 años, fue escolta en Tennessee y Arizona. Su equipo está en contacto con el gobierno iraní, pero la situación no parece favorable, y están cerca de quedarse sin trabajo.
"Todo apunta a que no podrán finalizar la temporada en Irán. No es bueno quedarse sin trabajo y todas sus cosas están en Irán y no pueden recuperarlas. Además, es un período complicado del año, por el cierre de los mercados de fichajes", agregó el agente.
La NBA teme que el decreto de Trump impacte en su Liga
Por su parte, la NBA se contactó con las autoridades estadounidenses para analizar el posible impacto en la liga del decreto sobre inmigración aprobado por el presidente. "Hemos contactado con el Departamento de Estado y estamos en proceso de recabar información para entender cómo esta orden ejecutiva se aplicaría a jugadores de nuestra liga que son de uno de los países afectados", dijo en un comunicado el portavoz Mike Bass.
El portavoz recordó que la NBA es una competición "global", y dijo que está "orgulloso de atraer a los mejores jugadores de todo el mundo". Por ejemplo, los jugadores Thon Maker (Milwaukee Bucks) y Luol Deng (Los Angeles Lakers) son originarios de Sudán, uno de los siete países afectados por las medidas que llegaron con el arribo de Trump a la Casa Blanca.
Además de jugadores potencialmente afectados, la liga mantiene un programa llamado Baloncesto Sin Fronteras, que identifica talentos en el extranjero y facilitó a jóvenes sudaneses permisos para jugar en institutos y universidades de los Estados Unidos.
La orden de Trump, que suspende durante 90 días la concesión de visados y prohíbe la entrada a todos los ciudadanos de Irak, Siria, Irán, Sudán, Libia, Somalia y Yemen hasta que se adopten nuevos procesos de escrutinio, al tiempo que frena todas las acogidas de refugiados durante 120 días y las de sirios de forma indefinida.
Varios jugadores y entrenadores de la NBA, incluidas estrellas como LeBron James y leyendas como Gregg Popovich, han expresado en los últimos meses su oposición frontal a muchas de las ideas de Trump.
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