El Presidente de Peñarol, Juan Pedro Damiani, exigió una mayor colaboración del Ministerio del Interior de cara al clásico que se disputará en 16 días.
Por otra parte, defendió su postura de "tolerancia cero" al asegurar que el club no le entrega entradas a los barrabravas.
"Nosotros no tenemos ningún problema en sentarnos con el Ministerio del Interior. Pero, por otro lado, vemos al ministro del Interior que todos los días le pega a Peñarol por un cosa distinta", afirmó Damiani al portal web de El País.
Las declaraciones de la autoridad aurinegra surgieron a partir de que Eduardo Bonomi acusó al club de dar 23 entradas de "favor " a "Nandito", un hincha baleado en octubre.
"Peñarol no da entradas. A los hinchas que participaron en incidentes o promovieron desórdenes se los ha suspendido como socios", aseguró Damiani.
"La solución de esto es con la Policía y el Ministerio del Interior, o no hay solución", sentenció el presidente aurinegro, y agregó que "si adentro de las tribunas venden drogas, entra gente con armas o roban, los dirigentes de los clubes no pueden hacer nada".
Juan Pedro Damiani cree que las acusaciones que hace el ministro del Interior sobre la entrega de entradas a los barras sin saber si efectivamente pasó, o sin saber quién se las dio, "no solucionan nada".
Según le indicaron fuentes locales al diario El País, "además de una agenda, Nandito tenía 30 carnés de socios de Peñarol que fueron utilizados para sacar las entradas en el Estadio Centenario".
El Ministerio del Interior basa sus declaraciones en el informe de Inteligencia Policial de 2014 en el que se señaló que el líder de la hinchada recibía 250 entradas y las distribuía entre los cabecillas de la barra.
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