Hijo de madre dominicana y padre español, el joven Mariano Díaz tiene una idea fija: triunfar con el Real Madrid. Sabe que detrás del temible tridente comandado por Cristiano Ronaldo, existe otro, formado por Álvaro Morata, Marco Asensio y Lucas Vázquez.
Sin embargo, decidió quedarse en el equipo merengue para pelear por el puesto con el respaldo de Zinedine Zidane y la confianza del mejor jugador de Europa.
Mientras que en esa nación todo es: David Ortíz, Sammy Sosa, Pedro Martínez o Robinson Cano, (jugadores de béisbol), del otro lado del océano, un pequeño dominicano intenta ser la oveja negra del deporte y transformarse en un gran futbolista.
En 2011 entró a "La Fábrica", y con distintos altibajos, en 2015 se ganó la titularidad indiscutida con el Real Madrid Castilla (filial del primer equipo) y en esa temporada cautivó al técnico francés de la casa blanca.
Marcó 30 goles en 40 partidos y fue el goleador de su división. Su rendimiento también impresionó a Cristiano Ronaldo quien vio en él un talento impresionante a pesar de su corta edad.
Muy contento de seguir vinculado al mejor club del mundo durante los próximos años. Esfuerzo, trabajo e ilusión van a ser las claves para-
— Mariano Diaz Mejia (@marianodiaz9) January 9, 2016
-dar lo mejor de mi. Espero devolver con creces la confianza depositada en mi. ¡Hala Madrid y nada más!
— Mariano Diaz Mejia (@marianodiaz9) January 9, 2016
Únicamente dos diarios, de los más importantes de República Dominicana, hicieron una breve alusión de la hazaña que estaba consiguiendo el joven de 22 años: Había firmado un contrato profesional, por cinco temporadas, con uno de los mejores equipos del mundo.
Mariano Díaz debía elegir entre el banquillo y los pocos minutos que le proponía el Madrid, o la cesión a clubes como el Málaga o Leganés, que querían tener la calidad de ese número 9 entre sus filas.
Tras esa decisión comenzó a soñar. Zinedine Zidane, que ya lo conocía del Real Madrid Castilla, cerró toda posibilidad de ponerlo a préstamo y lo llevó a la pretemporada de Estados Unidos.
Desde ese momento, se convirtió en el primer dominicano en integrar la plantilla merengue y no decepcionó. En el partido de verano contra el Chelsea el joven delantero le demostró a "Zizou", con un espectacular gol, por qué debía fijarse en él.
Finalmente llegó la hora de debutar en Los 16avos en la Copa del Rey, Sólo 1/3 de los periódicos dominicanos se acordaron de él. Pero para Díaz esa tarde fue sumamente especial. Era la única chance en la que podría demostrar de que estaba hecho.
Su entrenador le advirtió que tendría pocos minutos, pero él le prometió que no abriría la boca si no jugaba. Debía aprovechar las mínimas oportunidades.
28 minutos tuvo el ariete hispano-dominicano para demostrar lo que podía hacer dentro del campo. Entró por Isco y esa media hora le bastó para convertir el séptimo y último gol, que le permitió debutar en la red.
Mariano Díaz sabe que por delante tiene muchas figuras de renombre. Que antes de la "BBC", tiene otros apellidos importantes, pero no baja los brazos. Quiere ser el primer dominicano en conquistar el Santiago Bernabéu y colocar a su país en el mapa futbolístico.
Aunque nació en Barcelona, su sangre esta teñida con los colores dominicanos. Gracias a su madre, oriunda de San Juan de la Maguana, el delantero forma parte de la selección mayor del país centroamericano.
Debutó a los 20 años en un partido amistoso contra Haití en el 2013. Con un 3-1 a favor consiguieron la Copa Quisqueya, y como si fuera poco estrenarse con un trofeo, también convirtió el último de los tres tantos.
"Estoy orgulloso de representar a esta bandera, a esta patria y a este país", reconoció el delantero después de ganar ese encuentro.
República Dominicana, tierra de beisbolistas de primer nivel, es débil en el fútbol. La selección se ubica en el puesto 121° del ranking de la FIFA y 15° de la CONCACAF, y ya no cuenta con chances de participar en el próximo mundial.
Un territorio en el que Mariano Díaz es un completo desconocido al lado de Johnny Cueto, Yordano Ventura o Edinson Vólquez, entre otros. De todos modos, su nombre podría abrirle una nueva puerta deportiva a los niños que deseen imitarlo.
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