El ex ministro brasileño Antonio Palocci decidió negociar con los fiscales de la Operación Lava Jato un acuerdo de delación premiada. Este viernes por la tarde, el condenado por corrupción advirtió a su abogado defensor, el criminalista José Roberto Batochio, de que tendrá que alejarse de su caso inmediatamente.
La negociación del acuerdo será hecha por dos abogados de Curitiba, Adriano Bretas y Tracy Reinaldeti. Los dos ya habían sido contratados por Palocci pero, sin mayores explicaciones, el ex ministro rompió el pacto inicial. Esta semana Palocci retomó las conversaciones con Bretas y Reinaldeti y decidió que aceptaría la confesión premiada. En los dos procesos en su contra, Palocci teme que las condenas puedan sobrepasar los 30 años de prisión.
El diario Folha de Sao Paulo constató que el alejamiento del abogado Batochio fue una exigencia de los investigadores del Lava Jato, porque el criminalista es contrario a ese tipo de acuerdo. La periodista brasileña Mónica Bergamo había anticipado este viernes que el ex ministro había reanudado las negociaciones con el abogado Adriano Bretas para colaborar con la Justicia a cambio de una reducción de sus penas.
El próximo paso para Palocci será desistir del pedido de hábeas corpus para ser juzgado por el Supremo Tribunal Federal (STF), corte que en menos de una semana ordenó liberar a cuatro presos del Lava Jato: el ex ministro José Dirceu, los empresarios Eike Batista y José Carlos Bumlai y el ex tesorero del Partido Progresista (PP) João Cláudio Genu.
Pesó en la decisión de Palocci la operación que la Policía Federal emprendió este viernes en torno a las transferencias de 8.100 millones de reales del banco público BNDES al grupo de frigoríficos JBS. Palocci está señalado en las investigaciones como uno de los intermediarios de las financiaciones que generaron supuestas propinas para el Partido de los Trabajadores (PT). Una de las hipótesis investigadas por la Policía Federal y los fiscales es que el partido se quedaba con parte de los traspasos del BNDES.
Otra influencia en la decisión de Palocci fue la confesión de Odebrecht. Los documentos incautados por la Policía Federal, después incluidos en la declaración del empresario, apuntan que el ex ministro fue responsable de administrar transferencias por valor de 128 millones de reales entre 2008 y 2013.
Palocci era llamado "El Italiano" en las comunicaciones internas de Obebrecht sobre los traspasos para el PT. El ex ministro negó por meses que era "El Italiano", pero el apodo fue confirmado por Marcelo Odebrecht, ex presidente de la constructora que lleva su apellido.
El ex ministro de Hacienda de Lula da Silva y jefe de la Casa Civil de Dilma Rousseff fue arrestado en septiembre de 2016 en un operativo del Lava Jato llamado Omertà, que quiere decir "ley del silencio" en el lenguaje de los mafiosos italianos y era, al mismo tiempo, una referencia al apodo que el ex ministro tenía en los registros de Odebrecht.
La delación de Palocci es vista como un potencial explosivo para el sistema financiero porque él era el principal interlocutor del PT con los bancos y algunos de los mayores empresarios de Brasil, como Joesley Batista, del grupo JBS, y Abílio Diniz.
LEA MÁS: