Al menos una decena de heridos, 48 detenidos, daños en el Palacio de Gobierno y dos tiendas saqueadas fue el saldo de las manifestaciones contra el aumento en el precio de los combustibles, conocido como Gasolinazo, en la ciudad mexicana de Monterrey.
Al filo de las 18:00, hora local (23:00 GMT) de este jueves, se concentraron casi 20.000 personas frente al Palacio de Gobierno estatal, ubicado en la Macroplaza del centro de la capital del estado norteño de Nuevo León.
La manifestación contra el Gasolinazo degeneró en actos vandálicos cuando un grupo de jóvenes lanzó piedras y petardos contra los policías que vigilaban el Palacio. Las piedras rompieron seis grandes vitrales históricos del inmueble.
La policía enfrentó a los jóvenes, quienes respondieron lanzando más piedras y otros objetos. Entre las víctimas de la violencia, salieron lesionados cuatro reporteros que fueron golpeados por los policías, entre ellos un fotógrafo de la revista Proceso.
Los manifestantes también utilizaron las vallas metálicas colocadas por la misma policía para lanzarlas contra los agentes.
De acuerdo con lo que informa el periódico mexicano El Universal, fueron detenidas 48 personas que se enfrentaron a la policía. "Fue un grupo de jóvenes el que vino a reventar una manifestación que se había desarrollado de manera pacífica", afirmó una autoridad policial de la ciudad.
Mientras ocurrían los enfrentamientos en el centro, decenas de personas saquearon dos sucursales de tiendas de muebles en el noroeste de la ciudad. Cientos de personas irrumpieron en las tiendas Famsa y Coppel para saquear ropa, aparatos electrodomésticos y otros artículos.
Para intentar frenar los enfrentamientos en el centro de la ciudad y los saqueos a otras tiendas, se movilizaron efectivos del Ejército a vigilar Monterrey.
En los últimos días se han registrado manifestaciones en todo el país contra el aumento de combustible y también hubo saqueos en cientos de tiendas.
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