En un nuevo episodio del juicio que lleva adelante la Fiscalía de Nueva York contra Efraín Campo Flores y Franqui Flores De Freitas por narcotráfico, salió a la luz que la DEA buscaba establecer un encuentro entre su informante y Cilia Flores, primera dama venezolana y tía de los acusados.
José Santos Peña, conocido como CS-1, declaró ante la defensa del caso que el agente del organismo antidroga Sandalio González le había encargado que consiguiera una reunión con la esposa de Nicolás Maduro. Sin embargo, el informante no tuvo éxito.
Según consigna Diario Las Américas, los abogados de los narcosobrinos tienen como estrategia desacreditar la información de la DEA. Para ello, buscan establecer un vínculo personal entre Santos Peña y los Flores.
En esa línea, la defensa cuestionó unos mensajes de texto entre CS-1 y González en los que aseguraba que quería "fastidiar" a Cilia Flores y "agarrarla por la vagina".
No obstante, el informante de la DEA sembró más dudas en el caso luego de mentir bajo juramento ante el juez, al negar que continuaba involucrado en el narcotráfico.
La defensa de los Flores presentó audios de Santos Peña en los que, desde la cárcel, daba expresas órdenes de continuar con el negocio.
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Esto le representó al informante de la DEA no recibir la carta 5K. Se trata de una carta que se le entrega al juez de la causa para que considere una reducción de sentencia, algo que había negociado CS-1 en su acuerdo de culpabilidad en septiembre pasado.
Este miércoles se desarrolla el séptimo día del juicio, en el que también testificará Juan Gómez, conocido como CS-3, y se cerrará el testimonio de Carlos González.
El juez Paul Crotty espera que este jueves el jurado emita un veredicto unánime.