Cerca de 50 manifestantes ingresaron por la fuerza a la Cámara de Diputados el miércoles por la tarde pidiendo una intervención militar, informó el diario Folha de Sao Paulo.
El grupo rompió una puerta de vidrio e ingresó, interrumpiendo la sesión que estaba siendo presidida por Waldir Maranhão en la ciudad de Brasilia.
#RevoltaDoPovoEsfoladoPeloGovRio Invasão na Câmara se transforma em pancadaria entre manif.e segurânças https://t.co/ef23dEc26M via @YouTube
— Guerreiro Imbatível (@GuerreiroSuper_) November 16, 2016
Hasta el momento, los manifestantes afirman no formar parte de ningún partido ni agrupamiento político. Se negaron a dar más información a la prensa sobre sus reclamos.
“Están todos locos. Tienen gente armada ahí dentro”
Parados sobre las mesas de los diputados, gritaron "Viva Sergio Moro", en referencia al principal juez de la causa Lava Jato, mientras otros propinaban golpes de puño a los agentes de seguridad del lugar.
Varios de ellos lanzaron gritos contra el Gobierno de Michel Temer, contra la corrupción y apostaron por una intervención militar en el país con proclamas como "un general aquí".
En medio de la confusión, el vicepresidente de la Cámara, Waldir Maranhão, suspendió la sesión y pidió la intervención de la Policía para liberar el Parlamento.
"Están todos locos. Tienen gente armada ahí dentro", dijo el diputado Beto Masur del PRB-SB, primer secretario de la Cámara, que estuvo negociando con las personas que irrumpieron en el recinto.
Todos fueron demorados por la policía legislativa dentro la Cámara y cuatro considerados líderes de la protesta fueron llevados a una sala para ser investigados junto a los dos responsables de la "agresión corporal" al personal, añadió.
Imágenes de televisión mostraron a los manifestantes exaltados, cantando consignas contra la corrupción ante la mirada asombrada de los pocos legisladores presentes. La actividad de la Cámara fue suspendida.
“Es preocupante y sirve de alerta. Estamos volviendo a la era de los extremos”
"Es preocupante y sirve de alerta. Estamos volviendo a la era de los extremos", dijo el diputado Betinho Gomes.
Brasil vive una jornada turbulenta en la que miles de funcionarios públicos protestaron en Rio de Janeiro contra el plan de austeridad que impulsa el gobierno del presidente conservador Michel Temer, que sucedió a la izquierdista Dilma Rousseff, destituida este año por adulterar las cuentas públicas.
La mayor economía latinoamericana, en recesión desde hace casi dos años, está sumida en una crisis política permanentemente alimentada por las revelaciones de un escandaloso fraude que desvió más de dos mil millones de dólares de la petrolera estatal Petrobras.
El país estuvo gobernado por una dictadura militar desde 1964 hasta 1985.
(Con información de EFE y de AFP)