La Asamblea Nacional de Venezuela, de mayoría opositora, suspendió este martes el juicio sobre la responsabilidad política del mandatario Nicolás Maduro en la crisis del país, así como una marcha al palacio presidencial, ante el inicio de un diálogo con el Gobierno.
"Aprobado, se acuerda diferir" los puntos de la agenda de este martes, anunció el jefe de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, tras explicar que no se trata de una "capitulación" de la oposición, sino que se inscribe en la búsqueda de una solución a la crisis.
Tras la sesión legislativa, Ramos Allup también anunció la suspensión de una marcha hacia el palacio presidencial de Miraflores, convocada por la oposición para el jueves, según dijo, por pedido del Vaticano. "Nos han solicitado que los eventos de marcha para el jueves sean pospuestos. Es sensato acatar", afirmó el asambleísta.
El jefe de la bancada opositora, Julio Borges, quien presentó la propuesta de aplazamiento por parte de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), señaló que uno de los principales resultados que esperan del diálogo es el adelanto de las elecciones presidenciales.
Según Borges, la oposición planteó además en la instalación de la mesa de diálogo, el pasado domingo, la liberación de opositores en prisión, que el Parlamento recupere "a plenitud" su poder y el nombramiento de nuevas autoridades electorales, acusadas de servir al Gobierno y que suspendieron un referendo revocatorio contra Maduro.
Añadió que la MUD propuso también al Vaticano que "de manera urgente se establezcan las medidas" para solucionar el desabastecimiento de alimentos y medicinas. "Estamos dándole el voto de confianza al Vaticano, nosotros no creemos en el Gobierno. Todo nuestro esfuerzo se hace en función de que nuestro pueblo pueda votar", manifestó Borges.
La MUD, que se dividió frente al diálogo pues 16 de sus partidos consideraron que no estaban dadas las condiciones, tomó la decisión unánime de postergar el juicio.
"Hacemos votos para que este diferimiento no sea eterno. Respetamos y aceptamos la opinión de la mayoría de nuestros compañeros", afirmó en el hemiciclo el diputado Freddy Guevara, del partido Voluntad Popular –fundado por el encarcelado Leopoldo López–, que se marginó del diálogo.
Aunque los diputados opositores lo han calificado de "juicio político", esa figura no existe en la Constitución, por lo que no se le puede hacer a Maduro un impeachment como ocurrió en agosto contra la entonces presidente de Brasil, Dilma Rousseff.
"No es suficiente con diferir este punto, lo que reconocemos como una decisión valiente. Deben renunciar a cualquier vía inconstitucional para resolver la crisis", manifestó al tomar la palabra el jefe de la bancada oficialista, Héctor Rodríguez.
La Justicia, acusada por la oposición de estar a merced del Gobierno, declaró al Parlamento en "desacato" y sus decisiones son consideradas nulas.