Durante la extensa jornada en la que la presidente suspendida se defendió en el Senado, uno de los encuentros más esperados ocurrió cuando fue interpelada por su ex rival electoral, el legislador Aécio Neves, quien la cruzó con duras acusaciones y motivó una airada respuesta de Rousseff.
"No podría imaginar, y creo que Su Excelencia tampoco, que después de despedirnos en el último debate electoral, nos encontraríamos aquí hoy en el Senado, en esta condición. Digo esto porque, crea, no hay ningún sentimiento de alegría. Actúo con mi obligación de senador", afirmó al inicio de su intervención.
Neves, quien perdió por un estrecho margen en 2014, continuó con una aclaración al indicar que su acusación no tiene relación con un "inconformismo" por el resultado electoral. "No es ninguna deshonra perder las elecciones, sobre todo cuando se defiende ideas y se cumple la ley", disparó. En un tenso ambiente, agregó: "Yo no diría lo mismo cuando se vence las elecciones faltando a la verdad y cometiendo ilegalidades".
Además, el líder del PSDB recordó que fue el Tribunal Supremo, y no su partido, quien abrió una investigación por el financiamiento de campaña del oficialismo, en relación a la acusación de Dilma en su presentación inicial.
"Su Excelencia usa los votos que recibió como justificativo para los actos que tomó. El voto no es un salvoconducto", espetó el líder opositor. Además, puso en discusión las cifras mostradas por Dilma. Y para terminar su intervención, en los cinco minutos permitidos, le preguntó a Rousseff si se sentía responsable por la dura recesión y los millones de desempleados.
Por su parte, Dilma también reconoció que nunca se imaginó llegar a esta circunstancia y argumentó su respuesta. "Lo que he dicho, y reafirmo para el señor (Neves), es que a partir del día siguiente de mi elección, fueron tomadas una serie de medidas políticas para desestabilizar mi gobierno", resaltó, y mencionó el pedido de recuento de votos, la auditoría de urnas y el pedido de investigación en sus cuentas.
Además, denunció que Neves la ha acusado "sistemáticamente". En tanto, explicó la crisis económica por factores externos, como la caída de los precios del petróleo y los commodities, y el cambio de la política fiscal estadounidense, que generó una devaluación de las monedas.