Un documento elaborado por la Fiscalía y divulgado este viernes por el portal del diario O Estado de Sao Paulo afirma que el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva "participó activamente" en las corruptelas en la estatal Petrobras.
"Hay elementos de prueba de que Lula participó activamente en el esquema criminal" que operó en Petrobras "y también de que recibió, directa e indirectamente, ventajas (financieras) indebidas de esa estructura delictiva", dice el documento, que está firmado por cuatro de los fiscales dedicados a investigar esa trama y ha cifrado los daños de la corrupción en por lo menos 2.000 millones de dólares.
"Considerando que una de las formas de pago de coimas dentro de la trama montada en Petrobras eran las donaciones electorales, se debe destacar que, desde 2005, Lula admitió haber sabido sobre esas prácticas de financiación ilegal de las campañas políticas", añade el escrito obtenido por O Estado de Sao Paulo.
También sostiene que "Lula sabía que las empresas hacían donaciones electorales 'por fuera' y que había un ávido reparto de los cargos públicos" a fin de facilitar esas irregularidades.
Lula respondió a través de sus abogados, que en una nota dijeron que ese documento "fue elaborado para darle titulares a la prensa" e "intenta encubrir la falta de argumentos" contra su cliente, del que sostienen que "es difamado desde marzo pasado" por la Fiscalía.
De esa manera, los fiscales afirman que "no es creíble" que Lula "desconociera la motivación de los pagos 'en negro' para campañas", que fue, según los investigadores, uno de los objetivos principales de la red de corrupción detectada en Petrobras, que salpica a medio centenar de dirigentes de casi todo el espectro político.
El documento reafirma que "esa estructura criminal" en Petrobras "perduró por lo menos una década", que sitúa entre 2004 y 2014, lo que coincide con los dos mandatos de Lula (2003-2011) y el primero de Dilma Rousseff, su sucesora, suspendida de sus funciones desde mayo pasado para responder a un juicio de destitución.
Asimismo, incluye entre los beneficiados de esas corruptelas a otros dirigentes del Partido de los Trabajadores (PT), fundado por Lula, y a líderes de formaciones que integraron la coalición que lo acompañó en el Gobierno, heredada luego por Rousseff.
El documento también hace referencia a las empresas privadas que participaban en la red de corrupción y obtenían con Petrobras contratos amañados, cuyos precios eran inflados a fin de repartir luego las diferencias.
"Ejecutivos de las mayores constructoras del país, que se reunían y viajaban con Lula, participaban en la trama criminal, incurrían en fraudes en las licitaciones de Petrobras y pagaban coimas", afirma.
En ese marco, agrega que "considerando que todas esas figuras directamente implicadas en esa estratagema criminal orbitaban en torno a Lula y al PT, no es creíble que desconociera la existencia de esos ilícitos".
Lula, quien ha sido acusado de "saber" de esas corruptelas por algunos de los implicados, como el ex senador del PT Delcidio Amaral, niega a rajatabla que haya tenido conocimiento y ha afirmado que es víctima de una "persecución política y judicial".
El ex presidente le ha dado carácter internacional a su defensa y hace diez días denunció esa supuesta persecución ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra.
En un proceso paralelo al abierto por la Justicia en torno a la empresa Petrobras, Lula responde ya formalmente por el cargo de intentar obstruir la acción de la Justicia, por un supuesto intento de soborno a uno de los implicados en la corrupción petrolera.