Las repercusiones por el histórico acuerdo alcanzado en la madrugada del miércoles entre el gobierno de Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC no se hicieron esperar.
Después de que se anunciara que Santos viajará este jueves a La Habana para participar en el anuncio oficial, junto al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y otros mandatarios de la región, como Michelle Bachelet, los líderes del mundo celebraron lo pactado.
El Departamento de Estado de EEUU saludó el acuerdo con un mensaje de su vocero, John Kirby. "Estados Unidos da la bienvenida al anuncio, deseando la llegada del evento mañana, y esperamos que las partes sigan avanzando hacia un acuerdo final de paz", señaló.
El año pasado, Estados Unidos nombró un enviado especial para el proceso de paz colombiano, Bernie Aronson, que también viajará a La Habana.
Aronson será el encargado de representar a EEUU en el evento oficial de alto perfil presidido por Juan Manuel Santos y Rodrigo Londoño Echeverri, alias "Timochenko", líder máximo de las FARC, junto al presidente de Cuba, Raúl Castro, y el canciller de Noruega, Borge Brende, los dos países garantes del proceso de paz.
Además, el secretario adjunto de la Oficina Asuntos Internacionales Antinarcóticos, William Brownfield, declaró que espera que el cese del fuego anunciado hoy en Colombia tenga un impacto regional en materia de narcotráfico. "Sin duda, cuando un gobierno negocia la conclusión de casi 50 años de conflicto armado con una banda que es una de las organizaciones narcotraficantes más grandes del mundo, habrá impacto en términos de la droga ilícita", expresó Brownfield en una conferencia de prensa en Costa Rica.
Por su parte, el ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, consideró el miércoles que el acuerdo para el cese del fuego bilateral supone "un avance decisivo en el camino hacia la paz".
“Es hora de que el ELN siga este ejemplo alentador y contribuya también al cese de la violencia en Colombia”
"Es hora de que el ELN (el Ejército de Liberación Nacional) siga este ejemplo alentador y contribuya también al cese de la violencia en Colombia", manifestó Steinmeier con relación a la segunda guerrilla más importante de Colombia, que no forma parte de las conversaciones.
Para el jefe de la diplomacia alemana, el acuerdo entre el Gobierno y la guerrilla anunciado acerca el final exitoso de las negociaciones de paz, el objetivo que anhelan los colombianos "tras décadas de derramamiento de sangre".
Steinmeier garantizó que Alemania, con el comisionado del gobierno para el proceso de paz en Colombia, Tom Königs, mantendrá su apoyo al país latinoamericano en su camino hacia la paz y la reconciliación, con apoyo a la Justicia y ayuda a las víctimas y a integración de los desplazados internos.
También el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, celebró y dio su apoyo al acuerdo de alto el fuego bilateral y definitivo entre el gobierno colombiano y las FARC.
"#SíALaPaz Celebramos y apoyamos histórico acuerdo entre Juan Manuel Santos y FARC de cese del fuego bilateral y definitivo", escribió Almagro en su cuenta de la red social Twitter. "Construir paz es una labor constante. Continuaremos apoyando todos los esfuerzos @OEA_oficial", agregó en otro mensaje.
La OEA acompaña a Colombia con su Misión de Apoyo al Proceso de Paz (MAPP) desde 2004, con un mandato que se ha extendido hasta enero de 2018.
Entre los gobiernos europeos que saludaron el paso dado el miércoles también está el gobierno español, que lo calificó este miércoles como "un gran paso" hacia una "paz estable y duradera" en Colombia.
Madrid congratuló al gobierno del presidente Santos por haber alcanzado el acuerdo con las FARC. "Este acuerdo constituye un gran paso hacia la consecución de una paz estable y duradera en Colombia y una espléndida noticia para Iberoamérica" y la comunidad internacional, señaló el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de España.
Repercusiones en la región
"Se trata de un paso fundamental hacia el fin de la violencia y la pacificación definitiva de Colombia, que representa una victoria para todos los colombianos y un motivo de júbilo para la región como un todo", aseguró a través de un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, en un mensaje de felicitación al pueblo y al gobierno colombianos.
Además, reafirmó su disposición a contribuir con el gobierno del país vecino y amigo para su plena implementación, lo que considera que abrirá "un nuevo capítulo" para Colombia.
El presidente de Perú, Ollanta Humala, definió como "momento histórico" el anuncio y saludó a su par y al pueblo colombianos. "Un fuerte abrazo al Pdte @JuanManSantos y al pueblo colombiano, en este momento histórico del cese del fuego que hará posible la paz", señaló en su cuenta en la red social de Twitter.
Hizo lo propio el gobierno de México a través de su canciller, Claudia Ruiz Massieu, quien definió el pacto como "un camino para la paz definitiva en Colombia, dando así por terminado uno de los conflictos armados más añejos del continente". "Es un anuncio que celebramos", saludó.
El ministro de Relaciones Exteriores salvadoreño, Hugo Martínez, aseguró hoy que el alto el fuego en Colombia "permitirá consolidar" la democracia en América Latina porque "coloca a la región como una zona de paz". Mientras tanto, la Cancillería de ese país anunció que el presidente Salvador Sánchez Cerén será "testigo de honor" en el anuncio oficial de cese del fuego el jueves en Cuba.
En el mismo sentido se pronunciaron a su vez el presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, y el presidente guatemalteco, Jimmy Morales.
El anuncio
"Hemos llegado con éxito al Acuerdo para el Cese del Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo", indicaron hoy los negociaciones del Gobierno y de las FARC en un comunicado conjunto leído en la capital cubana por el guerrillero Marco León Calarcá, alias "Luis Alberto Albán", y Marcela Durán, jefa de comunicaciones del equipo de paz de Santos.
El entendimiento incluye otros aspectos fundamentales para el fin del conflicto en Colombia, como la dejación de armas por parte de la guerrilla, las garantías de seguridad, la lucha contra el paramilitarismo y sus redes de apoyo y la persecución de las conductas criminales que amenacen la implementación de los acuerdos y la construcción de la paz.