El dueño de varias empresas estadounidenses de energía se declaró culpable de soborno y fraude fiscal, en lo que las autoridades federales de Estados Unidos describieron como un ardid para granjearse contratos de la empresa petrolera de Venezuela valuados en millones de dólares.
Roberto Enrique Rincón Fernández presentó su declaratoria de culpabilidad el jueves en Houston. Su sentencia será dictada el 30 de septiembre por el juez de distrito Gray Miller.
Rincón, de 55 años, es la sexta persona en declararse culpable de los cargos relacionados con una red de sobornos por la que algunos funcionarios responsables de otorgar contratos en PDVSA les ofrecieron cenas, vinos y los hospedaron en costosos hoteles.
Los seis han aceptado sanciones impuestas debido a su actividad criminal.
Rincón fue arrestado en diciembre en su casa en un suburbio de Houston después de que le presentaran cargos.
Su accionar
Los sobornos y relaciones fraudulentas en las que habría incurrido Rincón se habrían perpetrado en conjunto con cinco empleados de PDVSA cuyos nombres no fueron revelados en la acusación radicada en el tribunal, pero que están plenamente identificados por las autoridades de EEUU. Los hechos habrían ocurrido entre los años 2009 y 2014, según Telemundo.
Las responsabilidades de estos funcionarios de PDVSA están, básicamente, en el área de compras y licitaciones de la petrolera, pues eran quienes finalmente seleccionaban a las compañías a las que se les adjudicaban los contratos.
Para argumentar la acusación, los investigadores presentaron decenas de correos electrónicos entre los acusados y los funcionarios de PDVSA en los que se detallan pagos y presuntos sobornos por acciones que favorecieron las empresas de Rincón por varios millones de dólares.
En algunos casos, las compañías de Rincón fueron las únicas que aparecieron en la lista final como postulantes para obtener las licitaciones y para ello éste habría escondido su relación con las compañías que buscaban los contratos con la petrolera.