Coss Marte se convirtió tal vez sin jamás imaginarlo en un referente para millones de ex convictos alrededor del mundo que luchan por reinsertarse en el mundo luego de pasar tiempo tras las rejas. El hoy CEO y fundador de ConBody, una nueva rutina de ejercicios inspirada en el mundo de las prisiones en los EEUU, decidió tomar su historia de vida como un ejemplo inspirador para otros.
Tras perder más de treinta kilogramos mientras cumplía su condena de siete años en una prisión del estado de Nueva York por trafico de marihuana, y alertado por los doctores sobre su delicado estado de salud al padecer de altos niveles de colesterol y presión sanguínea, Marte se propuso aprovechar su tiempo dentro de la prisión para mejorar su estado físico.
Con un pronóstico de expectativa de vida al momento de ingresar a la cárcel de solo cinco años, el hoy empresario que brinda charlas TED y que ha sido entrevistado por medios todo el mundo, logró alcanzar su meta de pérdida de peso en solo seis meses y tras recuperar su libertad hizo realidad de sueño junto a sus socios – también ex convictos – Sultan, Ray, Derek y Shane.
Luego de ver como los prisioneros utilizaban su tiempo de ejercicio para mantenerse sanos no solo física pero también mentalmente, por medio de una rutina que puede ser realizada en cualquier lugar desde una pequeña celda hasta un patio comunitario, el grupo de ex convictos se propuso replicar lo vivido en la prisión y llevarlo en primera instancia al exigente mercado fitness de Nueva York.
Coss Marte comenzó entrenando a residentes del Lower East Side en 2013 mediante una rutina que no requería de equipamiento específico y diseñada para que pueda ser llevada adelante incluso dentro de los minúsculos apartamentos promedio de la "Gran Manzana".
Con el tiempo y gracias a la ayuda de sus socios la empresa comenzó a crecer, convertida hoy en un fenómeno mundial con franquicias en todos el mundo desde Turquía a Corea, pasando por Indonesia, Francia, Suecia y Sudáfrica.
Unidos por su pasado como ex convictos más que por su estilo de entrenamiento, tanto Marte como las decenas de instructores de ConBody que trabajan en las distintas ciudades alrededor del globo ofrecen su visión particular sobre lo aprendido dentro de la prisión en lo que hace a su aproximación sobre la rutina deportiva.
Mientras que algunos ponen el foco en el aspecto más científico del ejercicio, otros hacen hincapié en la música utilizada para motivar a los alumnos mientras que los ex adictos utilizan su experiencia de vida para inspirar a otros inmersos en el difícil mundo de las drogas.
"Antes que nada ConBody busca darle oportunidades de empleo concretas a ex convictos en un lugar donde puedan ganar un salario digno sin sentirse juzgados" compartió la vocera de la compañía Kate Clark y agregó que la consistencia es la clave para mantenerse motivado.
Más allá de las reservas que se puedan tener al momento de someterse ante las directivas de personas que en algunos casos cuentan con un nutrido prontuario, son cada vez más los que eligen este tipo de entrenamiento cansados de rutinas ya demodé como el Crossfit o Spinning, siendo particularmente las mujeres las más adeptas a ser las primeras en adoptar la nueva tendencia.
Los distintos gimnasios de ConBody que han ido surgiendo se burlan de alguna manera de los miedos de muchos de sus principiantes alumnos con espacios donde abundan las rejas símil prisión y con zonas dedicadas a que los socios se puedan tomar sus fotos estilo prontuario. Incluso de manera ocasional, se sirven comidas inspiradas en los menús de la cárceñ en las tradicionales bandejas de aluminio, cocinada por ex convictos devenidos en chefs.
Las clases de 45 minutos tienen un valor promedio de 45 dólares en los EEUU, algo que las pone al mismo nivel de rutina de moda como SoulCycle y PureYoga. Más allá del aspecto novedoso y cuasi superficial de la rutina, el hecho de que ofrezca una salida laboral a miles de personas que buscan comenzar una nueva vida seguramente le asegure un crecimiento sostenido en el mediano plazo a la nueva sensación fitness del momento.
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