advirtió el sábado que
que traspase la frontera marítima occidental en respuesta a los disparos de advertencia que Seúl efectuó el viernes a dos navíos norcoreanos en el mismo lugar, en un episodio más de la reciente escalada entre ambos países que comenzó luego de que Pyonyang realizara su cuarta prueba nuclear a principios de año.
"A partir de ahora abriremos fuero directo a cualquier buque de guerra de las fuerzas de
sin avisar,
en el mar del oeste", declaró la Armada norcoreana en un comunicado recogido por la agencia estatal de noticias KCNA.
Pyongyang acusó a Seúl de responder con un enfrentamiento militar y "peligrosos juegos bélicos antinorcoreanos" a su llamada al diálogo, y le instó a ser consciente de que
La advertencia se produjo un día después de que la Marina de Corea del Sur realizase cinco disparos de advertencia cuando dos navíos norcoreanos (un pesquero y una patrullera) atravesaron la conflictiva frontera que separa las aguas territoriales de los dos países en el mar Amarillo.
Ambas embarcaciones regresaron inmediatamente a la parte norte tras las descargas.
En su declaración, el régimen norcoreano reprochó al país vecino su "provocación militar imprudente", producto de un "siniestro plan premeditado" para entorpecer las relaciones entre el norte y el sur y agravar la tensión en la península coreana, y exigió una disculpa.
La disputada frontera del mar Amarillo es una de las áreas más sensibles y conflictivas de la región que ha sido escenario en los últimos años de sucesos de diversa gravedad como varios intercambios de artillería o el hundimiento del buque Cheonan en marzo de 2010, con 46 muertos, que Corea del Sur atribuye al Norte.
El incidente tuvo lugar en un momento de tensión en la península coreana tras los ensayos nuclear y de misiles realizados por Corea del Norte a principios de año, y las consecuentes sanciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (ONU) impuestas sobre el hermético país en marzo.