"Un árbol por cada recién nacido", un proyecto eco en el corazón de Bariloche

Se trata de una iniciativa de reforestación que impulsa una concejal mapuche y abarca a toda la provincia patagónica. Propone en cultivar una especie autóctona o frutal por cada nuevo bebé

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Otras ciudades argentinas ya le solicitaron copias del proyecto a la impulsora del programa
Otras ciudades argentinas ya le solicitaron copias del proyecto a la impulsora del programa

"Un bebé, un árbol autóctono". El proyecto, aprobado por unanimidad por el Concejo Deliberante de Bariloche, es un programa ecológico que acompañará el crecimiento poblacional de la ciudad con un ambicioso plan de reforestación barrial y recuperación de la flora originaria. Encarna una simbología poderosa: homenajear a un recién nacido con la plantación de un árbol.

Otras ciudades argentinas ya le solicitaron copias del proyecto a la impulsora del programa
Otras ciudades argentinas ya le solicitaron copias del proyecto a la impulsora del programa

"¿Por qué no hay más arbolitos? ¿Qué nos pasó en el medio que nos fuimos quedando sin árboles?", se preguntó María Cristina Painefil del espacio Juntos Somos Bariloche y autora e impulsora principal de la iniciativa. Con un origen humilde, perteneciente al pueblo mapuche tehuelche, la concejal recibió sostén social y legislativo para convertir este deseo -"para mí era algo tan naif, tan simple"- en una ordenanza municipal efectiva. En diálogo con Infobae, reveló que el programa final surgió de la nostalgia de sus primeros recuerdos: "Tenía que ver con mi infancia, con mi niñez. La idea es recuperar nuestra idiosincrasia con la flora y la fauna autóctona, con árboles originarios de nuestra ciudad: no sólo pinos".

 Shutterstock 162
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El proyecto establece que ante cada nacimiento, la familia debe recibir un árbol autóctono o un árbol frutal, el que desee. Los nuevos dueños podrán plantarlo en su casa, en su patio, en su cuadra o bien donarlo a la municipalidad para que sea cultivado en un espacio público. "Necesitábamos involucrar a los vecinos para que sean ellos mismos los propios guardianes de los árboles", explicó Painefil. En la práctica, la familia dispondrá de un ejemplar presentando sólo la partida de nacimiento. La comuna tendrá la obligación de empatar la misma cantidad de árboles con los recién nacidos. Los que no hayan sido solicitados serán asignados a diversas vegetaciones conforme el plan de reforestación.

Por cada año nacen en Bariloche 2500 bebés

La Secretaría de Obras y Servicios Públicos será el órgano de aplicación, a través de la Dirección General de Parques y Jardines, quienes determinarán la especie que se plantará en cada zona, barrio o casa de acuerdo a los requisitos del hábitat para desarrollarse adecuadamente. A la par, se entabló una alianza con la Dirección de Bosques de la Provincia de Río Negro y otras ONG para que sean los proveedores de los árboles a través de la gestión de recuperación de un vivero municipal. La autora del programa anunció que estará activa plenamente antes del mes de julio.

El proyecto fue aprobado por unanimidad en una sesión legislativa de fines de abril y su única modificación en el trabajo de judicialización fue la introducción de las especies frutales como una opción para elegir. Desde el primer momento fue bien recibido por la comunidad. "La repercusión fue impresionante -contó la autora-. La primera vez que salió la comunicación del Municipio la gente estaba muy contenta. Nos dicen que ahora los barrios se van a convertir en bosques". La representante del bloque Juntos Somos Bariloche le adelantó a Infobae que ya le solicitaron copias del proyecto desde Corrientes, Paraná, Tres Arroyos, Tandil, Claromecó, Chascomús y Viedma, entre otras ciudades argentinas.

El programa activista "un bebé, un árbol autóctono" simula una plan final de reforestación con un fuerte contenido de conciencia ecológica. El valor del homenaje a cada nacimiento es la connotación de la iniciativa propulsada por esta concejal miembro de pueblos originarios. Tal como lo definiera María Cristina Painefil: "Una manera para que todos nuestros barrios vuelvan a lucir como cuando éramos chicos, con árboles autóctonos y frutales".

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