Mario Vargas Llosa no es sólo un escritor magistral, un hombre de letras, merecedor indiscutido del Premio Nobel de Literatura. Además de su intensa actividad política en Perú, su tierra, también es un agudo observador de los procesos políticos y, sin medias tintas, señala los males que los populismos -de izquierdas o de derechas- provocan en los países.
Este domingo, en un brillante artículo periodístico analizó de manera minuciosa la realidad argentina, tras el viaje que realizó semanas atrás. Son impresiones que presenta tras recibir el testimonio y conocer de primera mano lo que se vive aquí tras el final del gobierno de Néstor y Cristina Kirchner y la llegada de Mauricio Macri a la Presidencia.
Habla de la difícil tarea de "desmontar la maquinaria intervecionista que estaba arruinando a una de las naciones más ricas del mundo". Y admite que en su reunión mano a mano, Macri le pareció un político "desprovisto de la arrogancia que suele acompañar al poder". No elude la corrupción y plantea que la Argentina "puede ser un ejemplo" a nivel regional de países recuperan "la cultura de la libertad".
Las 9 impresiones de Vargas Llosa tras su paso por la Argentina
1- "Ha terminado por fin para Argentina el tiempo de los desvaríos populistas y el hechizo suicida que ejerció sobre el Gobierno de los Kirchner el "socialismo del siglo XXI" de Chávez y Maduro"