Marley tiene a su cargo la conducción del nuevo reality culinario de Telefe. Tras los éxitos de MasterChef y MasterChef Junior, el canal vuelve a apostar a un formato similar con Dueños de la cocina, en donde cocineros preseleccionados tuvieron que conseguir la aprobación del jurado, integrado por los famosos chefs Narda Lepes, Donato De Santis y Christophe Krywonis, para empezar a trabajar en un restaurante.
"Más de 2 mil cocineros se inscribieron para participar. Sólo 16 lograrán demostrar su temple ante un servicio abierto al público", explicó Marley al inicio del ciclo. Y agregó: "Su experiencia es real. Es un certamen extenuante. Sólo el más profesional se convertirá en el dueño de la cocina. Para acceder al restaurante se enfrentarán en una cocina de batalla: competirán todos contra todos. La competencia es ardua pero el premio lo vale: el ganador se llevará 300 mil pesos y un contrato para ser el chef de un restaurante de una de las cadenas gastronómicas más importantes del país".
El ciclo, ideado y producido por Telefe junto con Eyeworks, cuenta con una particularidad: los 16 participantes que fueron seleccionados en este primer programa tendrán que empezar a trabajar en un restaurante. Allí cocinarán para comensales reales, quienes les darán su opinión sobre sus platos.
En el debut, los aspirantes a ser los "dueños de la cocina" se presentaron y tuvieron que preparar un plato a gusto. Pero no presenciaron a los integrantes del jurado mientras lo probaba, sino que lo veían a través de un monitor sin sonido: sólo podían verles las caras.
Luego, ellos decidían quiénes entraban a la cocina. Cuando tenían dudas, pedían ver personalmente a los participantes para darles la posibilidad de un descargo y conocerlos mejor. Se guiaron no sólo por el gusto y la presentación de los platos, sino también por la personalidad de los cocineros.
El momento más emotivo fue cuando la participante Ana Paula Alberich presentó su plato. Es la hija mayor de una familia de 14 hermanos y su historia conmovió al jurado, principalmente a Narda Lepes, quien no pudo evitar quebrarse junto a la cocinera cuando contó su historia de vida.