Y en medio de una semana cargada de novedades en materia de causas por corrupción, Guido Antonini Wilson volvió a ser noticia. La razón: la Corte Suprema anuló la prescripción de la causa que se popularizó con su nombre al revertir un fallo de la Cámara de Casación, que sobreseyó al ex funcionario kirchnerista Claudio Uberti y dos dirigentes venezolanos.
Antonini Wilson fue la puerta de una investigación sobre los supuestos fondos de origen venezolano que habrían servido para el Frente para la Victoria en la campaña electoral de 2009. Es que el venezolano era quien llevaba una valija con casi 800 mil dólares que eran ingresados al país de manera irregular.
"Estoy en condiciones de declarar", dijo hoy Wilson en diálogo con el canal América. Más allá de que respondió a las consultas de ese medio, sostuvo: "Esto ha sido sensacionalismo mediático, pero nada concreto. Me encantaría que fuera la Justicia la que haga las preguntas".
El hombre insistió en que no sabía el contenido de la valija y que si la llevaba con él era por pedido de Victoria Bereziuk, secretaria de Uberti, por entonces jefe del organismo de control de las autopistas nacionales concesionadas (OCCOVI). Dijo, además, que había una segunda valija que, según escuchó, tenía 4,2 millones más.
Antonini Wilson reiteró su versión de los hechos: dijo que estaba en el vuelo privado que aterrizó en Aeroparque porque fue invitado la petrolera PDVSA en un viaje cuyo objetivo era vender tuberías para el gas.
Tras ratificar que colaboró con el FBI, dijo que antes de ese viaje conocía el nombre de Julio De Vido. Según detalló, en su país se hablaba del ex ministro de Planificación como "el hombre de los contactos entre Argentina y Venezuela". Y dijo que Uberti actuaba en representación del hoy diputado.
"Creo que el mundo cambió y la gente quiere Justicia. La gente se cansó de que el mal se salga con la suya", concluyó.