Sin embargo, todas estas construcciones que llaman tanto la atención internacionalmente, en especial en países donde este tipo de extravagancias todavía no llegaron, ya no podrán diseñarse más, de acuerdo a un nuevo plan del gobierno chino para cambiar la perspectiva arquitectónica del país, alejándose de lo estrafalario para acercarse cada vez más al diseño sustentable. El Consejo de Estado de la República Popular China, el gabinete de este país, y el Comité Central del Partido Comunista dieron a conocer unas directivas sobre el futuro de la arquitectura local. En estas reglas se rechazan las construcciones "demasiado grandes, xenocéntricas –la preferencia de estilos o ideas de otra cultura en vez de las de la propia- extrañas, y que no posean tradición cultural".
Es por eso que no se podrán construir más edificios que el gobierno considere "extraños" acorde a sus estándares, y en cambio se favorecerá el planeamiento de desarrollos arquitectónicos "más adecuados, económicos, verdes, y agradables a la vista". Cabe destacar que la mayoría de estas condiciones son relativas, y dependerá su caracterización del sentido de estética del que tome la decisión final. Y como quizás pronto se termine esta época de revolución arquitectónica en China, a continuación se muestran cinco de sus edificios más llamativos, tan extravagantes como fantásticos.
Este magnífico y futurista hotel ubicado en Huzhou, China, es un arco gigante en el centro de esta histórica ciudad. El Sheraton Huzhou Hot Spring Resort, uno de los tantos de la célebre cadena hotelera, posee un diseño moderno, además de original. Su estructura geométrica diseñada por Yansong Ma es casi hipnótica, y es uno de los atractivos principales de Huzhou. Las habitaciones tienen balcones privados con vista al Taihu Lake, y los lujos de este lugar incluyen spas, saunas y piletas con hidroterapia.
Diseñado por el arquitecto francés Paul Andreu, el Gran Teatro Nacional de Beijing fue inaugurado en 2007, luego de más de seis años desde que se comenzó su construcción. La estructura mide poco más de 46 metros y ocupa una superficie total de 200 mil metros cuadrados. Es popularmente conocido como el "huevo" y tiene una capacidad para 6.500 personas. La cúpula de titanio y cristal genera un efecto espectacular cuando se la ve reflejada en el lago artificial que rodea el teatro.
El edificio de la sede de la Televisión Central de China (CCTV, según sus siglas), mide más de 234 metros de altura y es una de las estructuras más impactantes de la ciudad de Beijing. Fue diseñado y creado por los arquitectos Rem Koolhaas y Ole Scheeren y se encuentra en el multitudinario Beijing Central Business District. Comenzó a construirse en 2004, y la inauguración fue el 1° de enero de 2008.
El Beijing Tianzi Hotel es uno de los más claros ejemplos de la arquitectura extravagante que se apoderó de China luego del enorme crecimiento económico del país asiático. Este extraño hotel que muestra tres figuras en tradicionales atuendos fue incluida por los Guinness World Records en su lista como "el edificio más grande que representa una imagen", sin dudas, un honor que atraerá cada vez más visitantes.
El estadio nacional de Beijing es una de las mayores construcciones deportivas. Con 330 metros de largo, 220 de ancho y 69 de altura, está equipado con un sistema de energía solar y de recogida de agua de lluvia para su limpieza y el riego de su césped. Este magnífico lugar fue diseñado por el artista mundialmente conocido como Ai Weiwei, junto con Pierre de Meuron, Jacques Herzog y Li Xinggang, con ocasión de los Juegos Olímpicos de 2008.